El líder socialista español, Pedro Sánchez, y el presidente de Ciudadanos (liberales) Albert Rivera, se emplazaron hoy a un diálogo en los próximos días en el marco de los contactos para la formación de un nuevo Gobierno.
EFE
El contacto tiene lugar después de que el jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, Mariano Rajoy (PP, centroderecha) declinara ayer el ofrecimiento del Rey para presentarse a la investidura a la reelección.
Fuentes de Ciudadanos informaron de esa breve conversación telefónica de hoy, que es la primera toma de contacto entre ambos líderes políticos ante el nuevo escenario abierto ayer al finalizar el rey la ronda de contactos para la formación de un nuevo Gobierno.
Felipe VI empezará el miércoles 27 otra ronda de contactos de varios días la que saldrá otra propuesta de candidato a jefe de Gobierno.
Sánchez y el líder de Podemos (izquierda), Pablo Iglesias, también dialogarán en estos días después de que éste planteara ayer un gobierno de coalición en el que el socialista sería presidente y él mismo el vicepresidente.
Por su parte, en su cuenta de Twitter, Sánchez explicó que habló con Albert Rivera de la situación política y que coincidieron en que España “necesita diálogo”.
En so coincide con el líder liberal, quien apuntó que fue Sánchez quien le llamó hoy y apuntó que en los próximos días “hay que dialogar, desde el acuerdo o desde la discrepancia”.
Las elecciones del pasado 20 de diciembre dieron al PP 123 escaños, por 90 del PSOE, 69 de Podemos y 40 de Ciudadanos, en un Congreso en el que la mayoría absoluta está fijada en 176 diputados.
La oferta de Podemos para gobernar en coalición ha avivado aún más el debate abierto en el PSOE sobre qué opción es la más favorable para que Pedro Sánchez sea presidente, aunque en las filas socialistas no se ponen de acuerdo sobre cuál sería la mejor combinación.
Sánchez recogió ayer el guante lanzado por el líder de Podemos, Pablo Iglesias, para negociar una coalición de gobierno, pero sin concretar si estaría dispuesto a compartir carteras, algo que no estaba en su mente.
La tesis que ha mantenido hasta ahora el secretario general es que el escenario más adecuado sería un gobierno monocolor, “progresista y reformista”, liderado por el PSOE y que contara con el apoyo y la complicidad de otras fuerzas “a derecha e izquierda”.
Ayer Sánchez dijo que pretendía dialogar “a derecha y a izquierda”, lo que sugiere que puede implicar a Podemos y Ciudadanos, porque a los tres les “une el cambio”.
Sánchez cuenta con que los partidos nacionalistas puedan favorecer su abstención, pero garantiza que no buscará el apoyo de los catalanes, sin descartar un acuerdo con los vascos.