El alto costo de los disfraces para los niños han hecho que hasta un 60% bajen las ventas en las tiendas de los centros comerciales y de los puestos informales en Maracaibo, reseñó Panorama.
Los vendedores aseguran que las compras de estos trajes se ha tornado imposible para padres y madres que por tradición vestían a los pequeños de sus personajes favoritos.
“Años atrás, hasta con 15 días de anticipación la gente venía a comprar sus disfraces, ahora no viene ni la tercera parte, yo creo que son los precios”, así lo comentó, Yoleida Ferrer, vendedora de disfraces.
No se observan muchas tiendas llenas de trajes, sin embargo, los comerciantes más fieles a la tradición ya se han preparado exhibiendo piezas.
En el centro de la ciudad el traje más pequeño puede costar entre 7 mil y 10 mil bolívares, y un disfraz para niños de unos 12 años puede costar hasta 18 mil bolívares.
Las vidrieras muestran distintas opciones, desde los vestuarios tradicionales de los personajes de la televisión como El Zorro, el Chapulín, Superman, Capitán América, Iron Man y Monster High.
“Las ventas están malísimas, en comparación a otros años cuando llegaba la gente entusiasmada a comprar uno o varios trajes para sus niños, ahora vendemos pocos”, así lo afirmó Javier Romero comerciante de una tienda de disfraces ubicada al centro de la ciudad.
Los representantes miran con recelo las pocas tiendas que ofertan disfraces, ya que los altos precios eliminan la posibilidad de llevar esa chispa de alegría a los más pequeños de la casa.
Para Patricia García la opción de este año ha sido comprar disfraces usados por internet. “No puedo comprar tres disfraces para mis niños, necesitaría como 50 mil bolívares para que lo usen solo un ratico. encontré varias opciones por grupos de venta en el Facebook donde me salen mucho más económicos y para el próximo Carnaval, los vendo y compro otros usados”, dijo.
Los comerciantes esperan que las ventas se levanten en los próximos días.
Fijan sus esperanzas en las fechas, pero consideran que hicieron una peligrosa inversión que podría no dar los resultados esperados.