Algunos turistas están suspendiendo viajes a América Latina y el Caribe y eligiendo otros destinos por temor al brote de zika.
El virus transmitido por mosquitos puede causar síntomas relativamente menores, pero mucha gente expresa alarma por un posible vínculo entre el zika y los trastornos que están registrando numerosos bebés, sobre todo en Brasil.
El doctor Brian Levine, de Nueva York, especializado en fertilidad, dijo que pasó “la mayor parte de la semana pasada asesorando a los pacientes sobre el virus del zika”.
“He tenido conversaciones sobre la suspensión de viajes si una mujer está embarazada, o si planea someterse a una fertilización in vitro. Algunos maridos incluso me entregaron semen congelado porque planean viajar a una zona donde hay zika”, declaró Levine.
Una pareja neoyorquina, Mark LoCastro y su esposa, que está embarazada, suspendieron un viaje a Saint Lucia. “Decidimos ir a Charleston, South Carolina”, expresó LoCastro. Agregó que vio que varios amigos están cambiando también sus planes de viaje y anunciándolo en las redes sociales con el hashtag #zikafreezone.
Laura E. Lynn, quien está en el quinto mes de embarazo, canceló una vacación en Playa del Carmen, México, con sus padres, su hermana y sus maridos. “No concibo tener que usar mangas largas, estar paranoica por la posibilidad de ser picada por un mosquito, sin poder relajarme”, expresó.
La agente de viajes Sandy Anderson dice que una pareja que pensaba ir al Caribe optó en cambio por viajar a Hawai porque se sentía “incómoda” con la idea de ir a una región en la que hay un brote de zika.
“Dentro de dos semanas tenemos una boda en México y dos parejas ya han cancelado el viaje porque las mujeres están esperando bebés”, dijo Anderson, propietaria de la agencia Travel Leaders Riverdale de Coon Rapids, Minnesota. El portal de la agencia incluye enlaces con la página de los Centros de Control de Enfermedades (CCE) con recomendaciones sobre el zika y se asegura de que sus clientes comprenden lo valioso que es tener un seguro que permite cancelar un viaje “por cualquier razón”.
Hung Thai, un ingeniero de Seattle, decidió seguir adelante con sus planes de casarse en diciembre en la Riviera Maya de México. “Pero le recomendaremos a nuestros invitados que compren seguros de viaje”, manifestó. Thai y su prometida Lina Jiang le están diciendo a sus amigas embarazadas que “entendemos perfectamente si deciden cancelar el viaje. No querríamos que viajasen a nuestra boda si están embarazadas”. Al mismo tiempo, creen que para la mayor parte de la gente, los riesgos son mínimos “y no hay que caer presas del pánico”.
La planificadora de la boda de Thai, Carla Schipper, quien trabaja con la agencia Unique Romance Travel & Destination Weddings, dice que le recomienda a sus clientes que si están esperando o planean quedar embarazadas, “deben viajar a Hawai, el sur del Pacífico o Europa”.
Kenneth Robinson logró que Spirit Airlines le diese un reembolso tras suspender un viaje a Nicaragua. Robinson y su esposa querían que su madre cuidase a su bebé una semana en marzo para que ellos pudiesen tomarse una vacación, pero suspendieron el viaje porque planean tener un segundo hijo y una estadía “en una cabaña de una playa junto a un bosque tropical, sin aire acondicionado ni ventanas, nos haría correr un gran riesgo de ser picados por mosquitos”.
“Estamos viendo si vamos a esquiar a Canadá”, agregó.
Varias aerolíneas estadounidenses han dicho que no aplicarán multas a las mujeres embarazadas, y en algunos casos a sus acompañantes, que cancelan viajes siguiendo recomendaciones de los CCE. Muchas empresas que ofrecen cruceros y agencias de viajes están ofreciendo créditos para futuros viajes y permitiendo cambiar el destino a las mujeres embarazadas.
La aseguradora Travel Insured International dice que ha habido un aumento del 30% en la compra de pólizas que permiten cancelar viajes “por cualquier razón”. “Lo atribuimos al virus del zika”, dijo su portavoz Isaac Cymrot. Julie Loffredi, editora de InsureMyTrip.com, reporta también un “creciente interés en las pólizas de cancelación ‘por cualquier razón”’, y dice que atiende muchas llamadas de mujeres embarazadas que no saben bien qué hacer.
Algunos viajeros no prestan demasiada atención al zika. Christy Nielson, de Dallas, acaba de llegar a México con un grupo de amigos. “Hablamos del zika, pero decidimos llevar abundante repelente y ropa de manga larga en lugar de suspender el viaje. Por suerte, ninguna de las mujeres está embarazada ni piensa quedar embarazada, de modo que el riesgo no parece tan grande”, señaló.
Tara Cannon, de Vancouver, Canadá, quien tiene dos hijos y escribe el blog PintSizePilot.com, también piensa viajar a México. Ya ha ido con su familia a otros sitios donde hay dengue y chikungunya, y dice que usan repelente y mallas para dormir. “Nos mantenemos alertas y si aparecen mosquitos, hacemos lo posible para que no nos piquen”.
La hermana de Marissa Siebel-Siero sigue adelante con sus planes de casarse en Saint John, en el Caribe, a pesar de que “varias invitadas cancelaron el viaje porque están embarazadas”.
La novia se toma las cosas con filosofía “pondrá repelente en todas las canastas de bienvenida”, relató Siebel-Siero. AP