Hace más de tres semanas, el llenadero de agua potable para camiones cisterna, conocido como Planta C, se cerró. Giovanny Álvarez, conductor, dijo: “Abren cuando pueden porque no hay suficiente agua en los niveles de las piscinas para poner las bombas y llenar las cisternas”, los camioneros también desmintieron que el cilindro de agua potable tenga el ínfimo precio de 20 bolívares. “¿Eso qué es, un chiste? No, que digan la verdad en Planta C se llena el tanque con mil bolívares y hasta mil 500 con la maraña de los llenadores”, reseñó el diario La Verdad.
Por Mariela Nava
Son muchas las irregularidades que rodean el suministro de agua potable, según informó uno de los choferes, que prefirió no identificarse por miedo a represalias, la mayoría de los llenaderos ilegales están en San Isidro, “la Guardia lo sabe y no hacen nada, ellos nada más le hacen daño a los que andamos legal”, agua que no tiene ningún tratamiento, es decir, el agua cruda y salobre.
Con relación al aumento del agua, aseguran que más de 400 dueños de camiones cisterna que hay en Maracaibo están dispuestos a dialogar para llegar a un acuerdo, dejaron claro que el costo de la pipa se debe fijar en 300 bolívares como mínimo “para que dé la base”.
Sacando cuentas
Un cilindro de agua mete alrededor de 10 mil litros de agua, de los cuales salen 50 pipas. La ganancia del trabajador sería de dos mil 500 bolívares fuertes, si cobra la pipa tal y como lo ordena la municipalidad, en 50 bolívares, ganancia que a su juicio, no alcanza para llenar el cilindro y obtener una ganancia justa para los tres trabajadores del camión.
Los choferes aseguran que son ellos los que están aminorando la sequía y “el fracaso” de Hidrolago, al tiempo que exigen al Gobierno nacional que sean incluidos en los planes de transporte para solventar los problemas de repuestos y cauchos.
Este es el precio
Los llenaderos que están operando legalmente son Los Plataneros, San Isidro y Santa María. Donde cobran desde mil hasta dos mil 500 bolívares por llenar un cilindro de agua en el día, porque los que trabajan corrido hasta la noche cobran hasta tres mil bolívares por los 10 mil litros del preciado líquido, incluyendo la “maraña”.
Manuel González
“La Guardia Nacional Bolivariana nos tiene una guerra montada, cuando les da la gana nos mandan a parar, nos quitan los papeles de la bomba y nos obligan a echarles el agua gratis en su casa o en casa de algún familiar, de lo contrario nos amenazan con que nos van a llevar presos, entonces uno pierde el viaje por el abuso de ellos. Ya basta de tanto silencio”.