La canciller colombiana, Ángela Holguín, dijo hoy que ve factible que el 23 de marzo próximo se firme un acuerdo de paz entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC, que puede ser parcial o total, más de tres años después del inicio de las conversaciones.
EFE
“El 23 de marzo habrá algo, veremos si es la firma total del acuerdo o de una parte”, afirmó Holguín en Madrid tras reunirse con su colega español, José Manuel García-Margallo, y con los embajadores latinoamericanos acreditados en este país.
Los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) afirmaron ayer en La Habana que hay “avances sustanciales” en la construcción de un acuerdo para un alto el fuego bilateral y definitivo, sin precisar si será para el 23 de marzo, día fijado en septiembre pasado como plazo para la firma de la paz.
Lo “relevante”, a juicio de la canciller, es que el proceso se desarrolle con todo detalle, sin dejar temas pendientes que el día de mañana puedan generar alguna dificultad, de manera que se dé paso a una paz “duradera y estable”.
La semana pasada estuvieron en Colombia funcionarios de las Naciones Unidas para la preparar la verificación del futuro acuerdo el Gobierno y las FARC, así como la dejación de las armas de esa guerrilla.
Ahora tienen que elaborar una lista con los integrantes de esa misión, respecto a la cual Holguín recordó hoy que es competencia de las Naciones Unidas elaborarla.
“Buscan las personas idóneas y cuentan con apoyo de organismos como la Celac”, subrayó la canciller, quien confirmó que esa misión tendrá una oficina nacional, ocho regionales y un número aún no precisado de subregionales.
El Gobierno de Bogotá confía en que la ONU tenga todo listo para cuando se produzca la firma del acuerdo de paz, añadió la ministra.
Por su parte, el español García-Margallo mostró la disposición a que esa comisión de verificadores cuente con españoles, aunque la decisión final corresponde a Naciones Unidas, en cuyo Consejo de Seguridad se sienta ahora España como miembro no permanente.
Holguín agradeció el apoyo e interés de España por el proceso de paz en Colombia, pero también por iniciativas como la exención de visado para sus nacionales para estancias de menos de tres meses en la Unión Europea.