Recientemente abrimos desde el Hemiciclo de la Asamblea Nacional, el debate sobre la incidencia del narcotráfico en Venezuela, con el fin de desnudar y abordar en profundidad, no sólo los casos de drogas en el país, sino la supuesta vinculación de civiles y militares del gobierno de Nicolás Maduro, en el negocio más oscuro y ruin para la sociedad, como lo es el narcotráfico. He puesto a la orden mi inmunidad parlamentaria para investigar y sacar a relucir los nombres y apellidos e instituciones, que le hacen lobby a este negocio.
Yo quiero sensibilizar al pueblo venezolano sobre la gravedad de la penetración del narcotráfico en nuestra sociedad y en nuestras instituciones. De no atacar con mano firme este flagelo, podrían estar comprometidas nuestras generaciones futuras, porque el narcotráfico no sólo es un negocio, sino que a nivel de individuos, destruye toda su capacidad intelectual y motora, y los hace vulnerables a delinquir y a cometer actos criminales como los que vemos en nuestro país cada día con mayor frecuencia.
No estamos hablando de una banalidad, ni estamos abordando este tema para pasar factura a nadie, es nuestro deber como parlamentarios profundizar nuestra lucha en temas tan escabrosos y con tantos tabú a la hora de ser mencionados. No obstante, según datos de las Naciones Unidas por Venezuela transitan más de 300 toneladas de cocaína al año, eso significa el 40% de la droga que se consume en el mundo. Entre el año 2007, 2008 y 2009, el 61% de la droga que fue distribuida y que entró a los distintos continentes, venía procedente de Brasil y Venezuela. Esto es muy grave porque según este reporte pareciera que desde el gobierno venezolano, se les está otorgando licencia a estas organizaciones delictivas para traficar. Además, el gobierno ha defendido con vehemencia a funcionarios involucrados con el narcotráfico sin que hasta ahora se haya hecho ningún tipo de investigación.
Con cifras tan escabrosas manejadas por la DEA, la ONU y organizaciones dedicadas a investigar el tema del narcotráfico a nivel internacional, se encienden las alarmas, porque en instituciones en Venezuela pueden estar corriendo un gravísimo riesgo de que en el país pueda estarse incubando un proceso donde el narcotráfico haya penetrado dichos organismos. Entonces, qué vamos a esperar. Llegó la hora de actuar caiga quien caiga, nosotros no vinimos al parlamento a proteger a unos soles o altos cargos, nosotros vinimos a defender a nuestro pueblo y a actuar con transparencia y seriedad para enrumbar a este país a un futuro de grandeza y emprendimiento.
Aquí el gobierno se ha hecho de la vista gorda en materia de narcotráfico, yo como parlamentario he consignado varias solicitudes de investigación sobre denuncias muy graves en esta materia y jamás se investigaron, quedaron dormidas y bajo el manto de la impunidad en el despacho de la Fiscal General de la República y de otros organismos judiciales en el país. Por ejemplo, el narcotraficante Walid Makled, denunció que altos funcionarios militares estaban comprometidos en este negocio, y que él pagaba vacuna a estos señores de dos y tres soles para poder acometer sus actos delictivos en nuestro país con absoluta tranquilidad.
A nosotros nos llegaron dos documentos certificados que dicen que Hugo Carvajal, actual diputado de la bancada minoritaria oficialista, está solicitado por tráfico de drogas por la justicia estadounidense. Yo no digo que eso sea cierto, por eso hemos aprobado esta investigación desde la Asamblea Nacional, porque es nuestro deber llegar hasta las últimas consecuencias en esta materia, porque los narcotraficantes no pueden seguir en libertad sin que se les aplique una pena judicial y una pena moral por los daños causados a la humanidad.
Basta de doble moral y que sólo caigan los peces flacos de este negocio, porque los grandes operadores son encubiertos por civiles y militares que hacen de este un gran negocio. Les digo, que de los 25 mil presos por droga en los últimos tres años en Venezuela, 18 mil entran en el rango de consumidores, y la cifra de los jefes de estos cárteles es ínfima en las cárceles de nuestro país.
Yo invito a los funcionarios civiles y militares del gobierno de Nicolás Maduro que estén señalados por estos organismos internacionales, y que se sientan aludidos, a ir a los países donde están siendo acusados para que se defiendan, y limpien su imagen frente al país si ese fuera el caso, pero no crean que con descalificaciones, insultos, pataletas o chantajes nos van a detener en nuestra investigación. Más temprano que tarde, aquí se va a saber toda la verdad en materia de corrupción y narcotráfico. No negociamos con delincuentes ni criminales, estamos del lado de la verdad y de la justicia.
Ismael García
Diputado a la Asamblea Nacional
PJ- Unidad Democrática
@ismaelprogreso