Una magistrada del Tribunal Supremo de Brasil rechazó hoy un recurso presentado por el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva en el que solicitaba la validación de su nombramiento como ministro, con lo que el político deberá esperar por la decisión del pleno de esta corte.
EFE
Lula había solicitado que el Supremo anulara una decisión cautelar tomada por otro de sus magistrados, en la que dejó sin efectos su nombramiento como ministro, le privó del fuero privilegiado y por tanto ordenó que los procesos penales abiertos en su contra tramiten en la justicia convencional.
Al denegar esta petición, la magistrada del Supremo Rosa Weber alegó que el caso es “delicado” y “complejo”, según informó el Tribunal Supremo.
La decisión final con relación a Lula será tomada por el pleno de la corte suprema, que está de receso y volverá a reunirse después de los festivos de Semana Santa.
La presidenta Dilma Rousseff, nombró a Lula como ministro de la Presidencia, la cartera más importante de su Gobierno, el pasado miércoles, aunque al día siguiente el nombramiento quedó en suspenso por una cascada de demandas ante los tribunales.
El juez del Supremo que denegó el nombramiento alegó que esa decisión de Rousseff se realizó “claramente” con el propósito de “impedir” un posible arresto de Lula por las causas por las que está siendo investigado.
La Fiscalía acusó a Lula formalmente de los delitos de lavado de dinero y falsificación por supuestamente haber ocultado que es dueño de un apartamento de lujo en un edificio de una constructora implicada en las corruptelas del caso Petrobras.
La palabra final sobre el nombramiento de Lula la tendrá el pleno del Tribunal Supremo, pero mientras tanto, el proceso por corrupción regresará a la jurisdicción del magistrado Sergio Moro, del Tribunal Federal de Curitiba.
Este juez es responsable de haber aplicado 93 condenas en los últimos dos años a implicados en el caso Petrobras, también ordenó que Lula fuera interrogado en una comisaría el pasado 4 de marzo y puso escuchas telefónicas para investigar al expresidente.