“Los eventos de Apple a menudo traen consigo una dosis de controversia, pero hoy la compañía ha alcanzado un nuevo mínimo: burlarse de la gente pobre”, escribe el experto en tecnología Napier Lopez en el portal The Next Web
López hace referencia al evento de presentación del nuevo iPad Pro, con una pantalla de 9,7 pulgadas, en el que Phil Schiller, vicepresidente de mercadotecnia global de Apple, ha considerado “realmente triste” que 600 millones de personas en todo el mundo utilicen un ordenador con más de cinco años de antigüedad.
Según el columnista, pocas personas optarían voluntariamente por el uso de un ordenador más antiguo si se le presentara uno más reciente de forma gratuita, “pero las computadoras ?especialmente las de Apple? cuestan mucho dinero”. “No hay nada de malo en tener un ordenador de trabajo antiguo, a menos que Apple considere que no querer o no ser capaz de gastar cientos o miles de dólares en un equipo nuevo es algo de lo que hay que avergonzarse”, afirma.