El ministro de energía eléctrica, Luis Motta Domínguez, confirmó la madrugada de este Martes Santo la paralización de cuatro de las 10 unidades de la casa de máquinas I de la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar en Guri, publica Correo del Caroní.
La represa cuenta con 20 unidades, repartidas a partes iguales entre la casa de máquinas I y II. De ese universo, solo 16 están operativas y suman 1600 megavatios indisponibles por razones diversas, entre ella una errada aplicación de los programas de rehabilitación.
Aunque el ministro no detalló cuáles turbinas salieron de funcionamiento, fuentes del sector aseguran que la paralización fue total e inició la madrugada del sábado con el propósito de recuperar 60 centímetros del embalse por día. Sería la primera vez que en los 42 años de historia de la represa, llamada Raúl Leoni hasta 2006, se detiene en su totalidad.
El jubilado de Guri y quien trabajó durante 40 años como supervisor de obras electromecánicas, Omar Barreto, indicó que los mantenimientos programados se hacen cada cinco años, una maniobra que denominan overhaul, en inglés, y que consiste en la apertura total de la máquina. Cuando una máquina se detiene de imprevisto, pues se reparten las cargas.
Tanto para Barreto como para el exgerente de la dirección de operación y mantenimiento de transmisión de Edelca, Hendel Carrasquel, tiene sentido la paralización, porque el nivel de eficiencia de la casa de máquinas II es mayor lo que, en consecuencia, genera un ahorro del consumo del embalse.
Barreto indicó que, a excepción de las unidades 13 y 14, las ocho máquinas restantes serían las primeras en detenerse. “Esas ocho máquinas (11,12 y de la 15 a la 20) están en la cota 232, serían las más susceptibles de pararse cuando el nivel del agua este muy abajo”.
La 13 y la 14, por el diseño de la represa y su fecha de incorporación, la vía de umbral está en la cota 215.
Las últimas en detenerse serían las unidades de la casa de máquinas I, cuya vía de umbral está más abajo, en la cota 191.33.
Dos funciones
¿Por qué tiene sentido? De llegar a la cota 240 (punto crítico), lo cual es muy probable según Carrasquel, el Sistema Interconectado Nacional (SEN) dependería exclusivamente de la casa de máquinas I.
“Una razón por la cual parar ahorita, en semana santa cuando la demanda baja, es porque puedo retirar máquinas del sistema sin tener que racionar mucho, porque la carga es baja y no necesitas tanta generación”, expuso el exgerente de operación y mantenimiento de transmisión.
Siendo así, apunta, “aprovechas dejar esas máquinas (la I) a punto, porque las vas a necesitar bastante después de la crisis. Entonces es una razón lógica pensar en hacerle mantenimiento ahorita aprovechando la baja demanda, y también, de paso, ganamos unos centímetros de agua”.
“Si yo turbino toda el agua ahorita por la casa de máquinas II, ahorro agua en cierta forma, porque esa misma agua pasando por casa de máquinas I genera menos energía. Por eso hay dos razones por la que es lógico la paralización: uno para hacer mantenimiento, y la otra para no usar esas máquinas que son las menos eficiente usando el agua”.
La semana que viene, con la demanda alta otra vez, indicó el exgerente, sería inviable hacer la misma maniobra, “porque vas a tener que racionar lo que ellas dejan de generar, así sean en forma ineficiente, por eso es que yo estoy seguro que la semana que viene las van a meter”.
Embalse racionado
El embalse de Guri se alimenta de los ríos San Pedro y Paragua, cuyo caudal ha disminuido por los efectos del fenómeno de El Niño. Empero, el embalse, el más grande de Venezuela y el onceavo del mundo, está diseñado para soportar períodos de sequía de hasta 32 meses. De modo que la nueva emergencia eléctrica, ha sido atribuida por expertos, a la mezcla de corrupción y negligencia.
La idea de apagar la Casa de Máquinas I pone a prueba la capacidad de respuesta del parque termoeléctrico cuya capacidad es de 17 mil 500 MW (la hidroeléctrica es 16 mil 900 MW), pero solo está operativa un 60 por ciento.
El último registro conocido anunciado por Corpoelec es de 246,53 metros sobre el nivel del mar (msnm), es decir, a solo 2,53 msnm de la zona de colapso (244 msnm).
No en vano, el Ministro de Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez, admitió recientemente que, dadas las circunstancias, en abril el país podría estar llegando al colapso eléctrico.