El Gobierno venezolano admitió hoy que fracasó su plan de prolongar el festivo por Semana Santa para intentar disminuir el consumo de agua y electricidad, y así minimizar los efectos de la sequía que padece la región a consecuencia del fenómeno meteorológico El Niño.
“Debo ser muy sincero: no tuvimos el impacto esperado; es decir, nosotros creímos y proyectamos que durante Semana Santa íbamos a tener una reducción considerable”, pero no fue así, reconoció el viceministro de Energía Eléctrica, Freddy Brito.
El festivo no se limitó en Venezuela a los llamados jueves y viernes santo, legalmente festivos nacionales no laborables, y se extendió por decisión del presidente venezolano, Nicolás Maduro, desde el pasado día 19 para concluir recién este domingo 27.
Maduro previó que la suspensión de las actividades laborales y educativas reduciría el promedio del consumo eléctrico venezolano que se sitúa en 15.500 megavatios por hora.
El viceministro de Energía Eléctrica destacó hoy en declaraciones al canal VTV de la red estatal de televisión que un 40 % del consumo nacional es residencial, principalmente con el uso de aparatos de aire acondicionado.
“Tuvimos un aumento de temperaturas (durante el asueto) y eso hace que el consumo en materia de aire acondicionado sea más alto”, explicó.
Del 60 % restante, Brito detalló que un 24 % corresponde al consumo comercial e industrial, un 21 % al consumo eléctrico de las llamadas empresas básicas, productoras de aluminio, principalmente, y un 15 % final que no detalló.
El presidente de Fedecámaras, la principal patronal de Venezuela, Francisco Martínez, lamentó la prolongación del festivo y vaticinó que afectaría aún más la producción nacional, en momentos en que Maduro ha prorrogado hasta mediados de año su decreto de emergencia económica nacional debido a la caída de los precios internacionales del petróleo, la principal y casi única fuente de divisas del país.
El viceministro de Energía Eléctrica también abogó por la “intensificación de las campaña de reemplazo de equipos” de alto consumo y remarcó que el fenómeno meteorológico El Niño, al que se atribuye la sequía, solamente la ha intensificado, “porque hace tres años de tenemos una sequía muy severa”, subrayó.
Se registra en la actualidad, reveló, “un descenso de las lluvias de un 30 %” en relación a períodos normales. EFE