Adalberto Peñaranda, continúa su línea ascendente en lo que tiene pinta de ser sólo el comienzo de una carrera meteórica. Con apenas 18 años, la semana pasada cumplió el sueño de debutar con la Vinotinto en la quinta jornada de clasificación para el Mundial frente a Perú y volvió a tener minutos en la abultada derrota en casa ante Chile para empezar a tomar balones y confirmarse como la gran promesa del fútbol venezolano.
Pero pese a su corta edad, Peñaranda, también sigue tirando de un Granada metido de lleno en la pelea por no descender. Con un disparo colocado a la cepa del poste izquierdo de Gorka Iraizoz, el venezolano marcó un tanto en San Mamés que le da un punto de oro y un empate que sabe a victoria y saca al conjunto granadino del descenso. Ya es un ídolo para los de José González.
Con este tanto suma 5 goles en la Liga y acaba con una sequía que se prolongaba desde el pasado 3 de enero. Al finalizar el encuentro, el delantero venezolano atendió a los medios de comunicación analizando la importancia del punto conseguido: “Lo valoro como un diez porque el equipo trabajó mucho, desde el portero hasta el delantero. Lo importante es sumar. En el gol definí como lo tiene que hacer un delantero, ajustándola al palo. El Granada en lo que resta de temporada lo importante es sumar, tres o uno, pero sumar.”