Los ministros de Finanzas de los 28 países de la Unión Europea endosaron reunidos en Amsterdam una serie de medidas para luchar contra la evasión fiscal y elaborar una lista de paraísos fiscales tras las revelaciones de los papeles de Panamá.
“El sentido de la urgencia es definitivamente mucho mayor”, dijo el ministro de Finanzas de Holanda, Jeroen Dijsselbloem, país que ocupa la presidencia semestral de la UE.
“Estuvimos muy ocupados compitiendo entre nosotros sobre los regímenes fiscales para hacer más atractivos nuestros países para las empresas”, añadió Dijsselbloem al inicio del segundo día de reunión de los ministros de Finanzas.
Los 28 países están “muy comprometidos en reducir las diferencias” de regímenes fiscales, afirmó.
Entre las medidas la UE propone crear una lista común de paraísos fiscales utilizados por las empresas o los particulares para evadir y reducir su base impositiva.
“Hay un respaldo unánime para que Europa cree su propia lista de paraísos fiscales para el verano”, dijo por su parte el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici.
De momento, sólo algunos países de la UE tiene una lista de paraísos fiscales, y las políticas son muy variables. En primer lugar deberán definir un método común para identificar quién podría figurar en la lista. La Comisión hará propuestas para la próxima reunión, en mayo.
Los ministros también respaldaron una propuesta de cinco potencias de la UE para intercambiar automáticamente las informaciones y así identificar a los beneficiarios de firmas pantalla.
Gran Bretaña, Francia, Alemania, Italia y España presentaron la idea en el G20 de Washington la semana pasada.
“Hay una voluntad convergente, asumida, proclamada, de luchar contra los mecanismos anónimos” que no permiten saber quién se esconde detrás de estas firmas, declaró el ministro francés, Michel Sapin.
La próxima semana los países de la UE también lanzarán discusiones sobre las nuevas reglas que exigen a las multinacionales que operan en Europa hacer públicas sus ganancias en cada país de la UE, indicó Dijsselbloem.
El proyecto de informar sobre las operaciones país por país responde al reclamo de las organizaciones no gubernamentales que acusan a las multinacionales de declarar sus beneficios en las jurisdicciones con una fiscalidad más favorable.
La UE está dividida sobre esta propuesta. Algunos argumentan que las informaciones sensibles de las empresas deben ser consultadas únicamente por las autoridades fiscales.
Las propuesta de la Comisión obligaría a las grandes compañías a publicar sus datos contables y fiscales, su volumen de negocios, sus beneficios así como la carga impositiva y los impuestos que pagan en los 28 países de la UE.
AFP