Una promesa de que el favorito para la nominación republicana Donald Trump adoptará un estilo más apegado a campaña presidencial no es señal de dar marcha atrás en sus principales políticas, como su promesa de construir una muralla en la frontera con México, dijo el domingo su más importante asesor.
Paul Manafort desechó la acusación del rival republicano Ted Cruz de que el magnate de los bienes raíces ha mentido sobre sus políticas de inmigración para “engañar a los votantes ingenuos”.
La discusión sobre el estilo y la sustancia de Trump precede a las primarias republicanas y demócratas en Pensilvania y cuatro otros estados del noreste del país: el próximo capítulo en el camino para las elecciones presidenciales de noviembre.
Cruz aprovechó los comentarios de Manafort en una reunión a puertas cerradas el jueves de los principales funcionarios republicanos en Florida de que Trump, de 69 años, moderaría la imagen que ha proyectado hasta ahora.
“Nunca dije que Trump no construiría una muralla. Nunca dije que Trump va a cambiar algunas de sus posiciones”, dijo Manafort en “Fox News Sunday”.
Agregó que Cruz, de 45 años y senador por Texas -el más cercano rival de Trump-, intentaba distraer a los votantes de sus propios problemas rumbo a la nominación.
Trump ha alarmado a figuras de alto rango del partido con descripciones poco favorables sobre los mexicanos, una promesa de deportar de inmediato a millones de inmigrantes ilegales y una propuesta prohibición temporal para que los musulmanes ingresen al país, entre otras cosas. Reuters