Ante el clima político generado por la recolección de firmas como un primer paso para ir al referendo revocatorio en contra del gobierno del presidente Nicolás Maduro, el alcalde del municipio Iribarren, Alfredo Ramos, manifestó que el sector oficial se encuentra en estado de pánico y va a hacer lo posible por obstaculizar ese proceso.
Nota de prensa
“¿Cuál es el miedo que tiene en medirse y que sea el pueblo el que decida? Ni el Gobierno ni su partido tienen la fuerza necesaria para evitar que los ciudadanos se manifiesten en su contra, y por eso miles de ellos firmaron”.
Es la necesidad, el hambre, la que mueve a la gente a buscar la salida democrática de Maduro, dijo el alcalde de Iribarren, quien asegura que 73 por ciento de los venezolanos se encuentra en situación de pobreza crítica. “Hay familias que comen solo una o dos veces al día, los productos de primera necesidad no se encuentran por la merma de la producción y no hay sueldo que alcance debido a los altos niveles de inflación”.
En torno a la tesis del Psuv, respecto a supuestas firmas falsificadas en apoyo al proceso refrendario, lo atribuye el mandatario local a la desesperación gubernamental. “Saben lo que se les viene encima”.
Acerca del llamado de Maduro a una huelga general indefinida si llegasen a sacarlo del poder, Alfredo Ramos respondió: “Él no tiene noción de lo que es una huelga porque fue delegado sindical designado a dedo, nunca fue electo por la fuerza trabajadora”.
Este miércoles, el mandatario barquisimetano se encuentra en Caracas, reunido con sus homólogos de la Unidad Democrática para exigir al Gobierno nacional que dé a las alcaldías y gobernaciones el dinero necesario para cumplir con los aumentos salariales decretados, pues el Jefe del Estado dicta incrementos que luego no honra con dinero, y las administraciones municipales no pueden asumirlos con los presupuestos en ejercicio. “Pretenden convertirnos en pagadores de nómina y dejarnos sin recursos para obras e inversión social”, cuestionó Ramos.