La parada programada de refinería El Palito inició con inventarios que ronda los 15 a 20 días de derivados de hidrocarburos. La distribución de combustible “está saliendo normal”, asegura Rober González, secretario ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela, en contacto telefónico con La Verdad.
Desde hace tiempo se alargaba atender los procesos de conversión, servicios industriales “y todas las áreas” donde se “atacan varios puntos, previo al análisis de los equipos que requieran el servicio”, detalla González, quien asevera que el plan es una parada de “mantenimiento mayor”.
El dirigente no ahonda en la situación de las contratistas y del Complejo Refinador de Paraguaná. “Hasta ahora no tengo reporte de nada”, precisa. Sí acentúa que los tiempos de mantenimiento están en “45 y 60 días y después quedan unos trabajos menores”.
Coincide que hay un “saboteo de algunas contratistas”, como destacó el presidente de la FUTPV, Wills Rangel, pero recalca que “también hay complicidad de algunos gerentes que están dentro de la industria, y eso es lo que él (Rangel) no se atreve a decir”. Será por la división interna que hay dentro de la federación, en la que Rangel es sindicalista y “también director de PDVSA”, ocupando un cargo de “confianza y alienado al patrono”.
En 2015 se conoció que la capacidad de procesamiento de la RELP estaba en 140 millones de barriles diarios de crudo medio, al cierre del período anterior reportó un volumen de 119 MBD. Recibieron 116 MBD de insumos destinados a procesos y mezclas, logrando contener y procesar 235 MBD, de los cuales 97 correspondieron a gasolina y nafta, 83 MDB a jet y destilados, 44 MBD residuales y 11 MBD otros productos. De acuerdo a PDVSA, 77 por ciento de la refinación es para el mercado local y 23 por ciento es enviado a países de América y Asia.