La diputada Manuela Bolívar visitó el hospital JM de los Ríos y aseguró que el centro hospitalario representa el colapso del sistema de salud en Venezuela. “Hoy el JM de los Ríos está en sus peores condiciones. Pisos clausurados, falta de insumos y equipos”.
Nota de prensa
Bolívar detalló que hay pisos cerrados porque se rompieron unos tubos de aguas negras. “Como no tienen insumos para poder reparar las fallas, lo que hacen es clausurar”.
La diputada criticó que el presidente Nicolás Maduro visitó el hospital en el 2011, cuando era canciller, y se comprometió a solucionar los problemas que tenía el hospital. Sin embargo, la situación del centro hospitalario sigue en deterioro sin que las autoridades actúen.
“El ministerio de salud no le da los suministros neesarios. No hay para medir la glucosa, la unidad de tomografía manejaba alrededor 40 pacientes por turno y hora está cerrada, los pacientes deben llevar los tratamientos para enfermedades respiratorias. Además, tienen únicamente 10 camas para hospitalización”, alertó.
La falta de inversión en el centro de salud ha dejado a niños imposibilitados de que les hagan la diálisis, debido a la falta de catéteres.
Bolívar criticó que en el 2003 se planteó la remodelación de uno de los pisos. Proyecto impulsado con distintos organismos públicos, pero hoy se encuentra sin concluir.
“No tienen baños para personal medico ni pacientes, las madres duermen en colchonetas debajo de las camas, hay un bote de aguas negras cerca de la unidad de terapia intensiva neonatal, situación por la cual han tenido que reducir el número de camas”, continuó.
La diputada agregó que el área de cardiología se encuentra paralizada porque no funciona el aire acondicionado, lo que ocasiona que los equipos se recalienten.
A la falta de insumos del centro hospitalario se le suma que el fin de semana no tuvo luz y semanalmente se les va el agua, según denunció Bolívar.
El tema de la comida es otra gran falla del centro hospitalario. “Las madres me cuentan que a los niños que están en diálisis les han dado de comer un bollito con pollo y vegetales, cuando los menores que están en esta condición no pueden ingerir proteínas porque los puede empeorar”.
“Se supone que el JM de los Ríos era la representación de un sistema de salud público creado en los 70, un modelo que incluso era de capacitación de pediatras, pero qué pasó con la bonanza. No hubo inversión social y por eso tenemos una de las peores crisis. Un sistema que le importe la condición social de la gente, debe asegurarse por lo menos de que la gente tenga garantizado el derecho a la salud”, concluyó.