La organización Human Rights Watch (HRW) pidió hoy a los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) que den apoyo financiero a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sumergida en la peor crisis económica de su historia.
Human Rights Watch, una de las ONG más importantes en la defensa de los derechos humanos, consideró en un comunicado que la crisis financiera que atraviesa la CIDH “pone en riesgo las posibilidades de justicia y protección para las víctimas de abusos a lo largo del continente” americano.
La CIDH, órgano autónomo de la OEA, anunció el 23 de mayo que tendrá que despedir al 40 % de su personal y suspender labores clave si no recibe antes del 15 de junio los alrededor de dos millones de dólares que le faltan este año para poder cumplir con sus funciones, entre las que se encuentran audiencias y visitas a países.
“Desde hace tiempo, la CIDH ha sido la última esperanza para víctimas de la región que durante años han luchado para hacer valer sus derechos en los sistemas judiciales nacionales”, consideró hoy en una nota de prensa el director para las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco.
“Si los Estados miembros de la OEA no atienden esta crisis financiera, sembrarán serias dudas sobre su compromiso con los derechos humanos, y levantaran sospechas de que pretenden librarse del escrutinio de la comisión”, añadió Vivanco.
De esta forma, como ya hizo la propia CIDH, Human Rights Watch pidió a los 34 Estados miembros de la OEA que asuman su responsabilidad con la defensa de los derechos humanos y corrijan la anomalía de los últimos años, en los que el organismo ha sobrevivido gracias a fondos voluntarios de países europeos.
La Unión Europea (UE) y sus socios se han visto obligados a cortar o reducir sus donaciones al sistema interamericano de derechos humanos para centrar sus recursos en una crisis que les es más próxima: la llegada de millones de refugiados que huyen de la guerra en Siria y de la violencia o la pobreza en otros países asiáticos y africanos.
“Puede ser que la reducción de donaciones de Europa haya desencadenado esta crisis, pero la principal responsabilidad de financiar a la Comisión corresponde a los Estados miembros de la OEA, que la crearon para que protegiera los derechos de sus propios ciudadanos”, resaltó Vivanco.
En este sentido, HRW hizo hincapié en la importancia de las audiencias de la CIDH, el “foro de derechos humanos más importante de las Américas” y en el que decenas de organizaciones denuncian abusos y tienen la posibilidad de interpelar directamente a las autoridades gubernamentales.
La Comisión es el elemento de mayor prestigio internacional de la OEA, junto a las misiones de observación electoral, y en su defensa ya salieron en mayo más de 300 organizaciones de derechos humanos del continente en una carta abierta. EFE