América Latina debe invertir en el sector salud y ganar en eficiencia ante un panorama económico regional endeble, pues es la única manera de afrontar las “vacas flacas” y avanzar hasta una cobertura de salud universal, identificó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS). EFE
“En los tiempos de vacas flacas hay muchas oportunidades, y los países de la región han avanzado muchísimo, aunque no todos (…) y no lo suficiente para llegar a este acceso universal”, dijo a Efe la representante de la Organización Panamericana de la Salud/OMS en México, Gerry Eijkemans.
En el marco del II Foro Latinoamericano de Salud, celebrado en la Ciudad de México con el lema “Salud 4.0. Ampliando la cobertura y la eficiencia en América Latina”, recordó que en la mayoría de países predomina el “modelo curativo”, basado en los hospitales y médicos especialistas.
En lugar de los médicos de cabecera, la atención primaria y la prevención, además de ser más efectiva, es más económica.
Sobre la inversión, Eijkemans explicó que se requiere “más dinero para gasto público en salud” porque actualmente solo se destina el 3,5 % de la inversión gubernamental a este rubro -muy lejos del 17 % de los países de la OCDE- y la OMS estima que la región necesita llegar hasta el 6 % para lograr la cobertura universal.
Para tal propósito, los Estados han de controlar la evasión fiscal y adoptar “políticas nacionales” como la subida de impuestos a comidas calóricas o bebidas azucaradas.
Asimismo, destinar más dinero a dicho rubro revierte en la economía, pues es uno de los sectores industriales más importantes del mundo.
Solo en América Latina representa el 7-8 % del Producto Interno Bruto (PIB) y, de aumentar un 1 % la expectativa de vida, el incremento del PIB es de nada menos que el 6 %, remarcó la experta.
El segundo gran factor a tratar es la eficiencia, pues entre un 20 y un 40 % de lo invertido en salud está “malgastado”.
“Hay gastos innecesarios, hay ineficiencias en cómo estamos organizados, dónde invertimos el dólar, si lo invertimos en el hospital o en un centro de salud, o en cómo compramos los medicamentos”, aseveró.
Así, inversión y eficiencia deberán ir encaminados a un modelo de atención que busque la promoción y la prevención, desechando el modelo curativo que sobresale hoy en día.
“Donde construimos salud no es en los hospitales, ahí reparamos enfermedades. Construimos salud en las casas, en los lugares de trabajo”, apuntó Eijkemans.
Un caso que evidencia la importancia de la prevención es el virus del Zika -expuso- pues solo a través de ella se evitará la expansión de esta enfermedad que produce el nacimiento de niños con microcefalia.
Elías Selman, presidente y fundador de la publicación AméricaEconomía, organizador de esta cita regional que se celebra miércoles y jueves en la capital mexicana, recordó que no se logró la cobertura universal, a pesar de los grandes avances del sector salud en América Latina en los últimos doce años.
“Ese desafío está pendiente y es lo que debe ser resuelto hoy día”, subrayó, agregando que el paciente latinoamericano ha cambiado y tiene enfermedades crónicas como la diabetes o las cardiovasculares.
En su discurso inaugural, el subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud de México, José Meljem, resaltó la necesidad de que exista un sistema de salud público “disponible para todos” aunque con “alcances y límites”, lo que -dijo- supone un “esfuerzo permanente”.
En esta reunión de la industria participarán una cincuentena de ponentes y servirá también para intercambiar experiencias y aportar propuestas para reducir los costos de salud regionales.
Entre los expertos destaca el exministro de Salud de Chile Álvaro Erazo o el director general de Planeación y Desarrollo en Salud del ministerio mexicano, Malaquías López.