El ministro español de Exteriores y Cooperación en funciones, José Manuel García-Margallo, instó hoy a la Unión Europea (UE) a tener una “implicación más activa” en la situación de crisis que atraviesa Venezuela.
“La UE tiene necesariamente que implicarse en Venezuela, es un país muy importante para la UE”, indicó García-Margallo a su llegada a un Consejo de Ministros de Exteriores de la UE, en el que hará una alusión a la situación en ese país aunque el tema no forma parte de la agenda de la reunión.
El ministro español hizo hincapié en que España “pide una participación, una implicación más activa en la UE”.
“La UE tiene que jugar un papel y España tiene que jugar un papel en Latinoamérica en todos los escenarios”, subrayó.
En particular, recalcó la “gran importancia” de que “se va a invitar a España a enviar a 50 hombres y mujeres a la misión de verificación del proceso de paz en Colombia”.
“Igual que estamos implicados en Colombia, nos gustaría estar implicados en Venezuela, entre otras cosas porque hay 200.000 españoles y porque Venezuela forma parte de nuestra comunidad histórica de naciones”, comentó.
García-Margallo indicó que “la UE en general y España en particular” apoyan un diálogo “que pueda conducir a cualquier gestión que siempre que no sea para perder el tiempo, sino que sea efectivo, que acabe en una reconciliación nacional”.
Esa reconciliación “sólo será posible si se libera a los presos políticos y si se abre un horizonte en el que los mecanismos constitucionales sirvan para acabar con la tensión existente en el país”.
En concreto se refirió a “la convocatoria de un referendo revocatorio en el que hable el soberano, el pueblo, de acuerdo con las prescripciones del la propia Constitución, que tiene un referendo revocatorio que yo sepa no existe en ninguna otra Constitución del mundo, pero si lo han establecido, que se aplique”.
“Ya se aplicó una vez, con (el antiguo presidente venezolano Hugo) Chávez”, agregó.
García-Margallo recalcó la importancia de que “funcione el Estado de Derecho” y de que “las dos partes se convenzan de que sólo dentro del marco constitucional, un diálogo puede dar salida a la gravísima crisis que vive Venezuela”.
“Es extraordinariamente urgente porque la situación es extraordinariamente grave y, si no se soluciona pronto, puede haber un conflicto social de consecuencias incalculables”, consideró.
García-Margallo recordó que el domingo mantuvo una “conversación muy larga” con el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y que habló también con la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, que se encontraba en Madrid.
“El único interés que el Gobierno español tiene es que se produzca una reconciliación en Venezuela, que es la condición imprescindible para acabar con la crisis humanitaria que el pueblo venezolano está sufriendo”, comentó.
García-Margallo aseguró que explicó a la canciller “que la solución pasa por el respeto a la Constitución íntegramente, incluyendo de los artículos que prevén un referendo revocatorio”.
También defendió “una auténtica separación de poderes, que el Tribunal Superior de Justicia no declare inconstitucionales todas y cada una de las decisiones que adopte la Asamblea Nacional”, controlada por la opositora Mesa de Unidad Nacional.
Por último pidió a la canciller “un respeto escrupuloso de los derechos humanos” y le sugirió “que la liberación de los 115 presos políticos sería una buena señal para ir propiciando ese clima de reconciliación”, además de reiterar “el ofrecimiento de España de considerar una fórmula de ayudar económicamente a Venezuela, empezando con una ayuda humanitaria”. EFE