En el caso de Leopoldo López, nuestro más emblemático preso político, cuya sufrida figura recorre al mundo a diario, a través de los noticieros, periódicos y redes sociales, este régimen despiadado no se conduele en absoluto y humilla no solamente al político reducido al enclaustramiento, sino que maltrata también a su esposa y a su madre, haciéndoles más penoso a estas damas trajinar con tan injusta causa. No menos importante y sentida, es la situación de Manuel Rosales cuya dignidad pretende doblegar y mancillar este gobierno moribundo. Rosales Guerrero, como lo indica su apellido, no cede un ápice en sus principios y desde la minusvalía enfrenta con resiliencia el fragor de la infamia. Para quien conoce a Manuel, no es de extrañar su entereza, su condición de hombre íntegro y su valor a toda prueba. Antonio Ledezma, es otro de nuestros líderes fundamentales, encarcelado por el delito de pensar diferente, de hacerle frente con hidalguía y pundonor a este régimen corrompido que abusa de la fuerza, intenta amedrentarnos encarcelando arbitrariamente a nuestros políticos ilustres y se vale de bandas armadas para intimidar a la población.
Los casos recientes en que se difieren reiteradamente las apelaciones de Leopoldo López, por el motivo más baladí, evidencia lo poco que este gobierno nefasto respeta la ley. El impedimento al acceso de los abogados españoles de Leopoldo, es sólo una prueba más de esto; igualmente la prohibición de la visita de la Comisión de DDHH del Parlasur al Alcalde Ledezma, ratifica lo antes dicho. Daniel Ceballos, igualmente sufre cárcel. Pero no solamente este régimen desalmado apresa a políticos importantes, sino que destacados luchadores como Villca Fernández, Rosmit Mantilla Renzo Prieto, Ronny Navarro, Juan Giraldo, Leocenis García, Raúl Emilio Baduel, Comisarios Juan y Rolando Guevara, han ido a parar con su humanidad a las mazmorras del gobierno. No sabemos si esta actitud de “matón de barrio”, es una manera de adelantarnos que así como no se cumple la ley en materia de derechos humanos, así mismo se incumplirá la letra constitucional que prevé el referéndum revocatorio.
El gobierno juega con fuego, su actitud de que no le importa lo que pueda pasar con un pueblo hambreado, que siente que no hay salidas por ningún lado, es altísimamente peligrosa. Es verdad que a todos nos afectará el caos, pero lo que es seguro es que el régimen no saldrá indemne, luego el revocatorio es una salida constitucional, ordenada que le permitirá al PSUV mostrar un talante democrático que le signifique sobrevivir en el panorama político venezolano y concurrir, como partido democrático a futuras elecciones.
Miguel Méndez Rodulfo
Caracas 8 de julio de 2016