El paseo de los Ingleses de Niza, escenario el jueves por la noche de un atentado en el que murieron más de 80 personas, es el lugar más simbólico de esta ciudad conocida mundialmente como la capital de la Costa Azul.
Niza, la quinta ciudad más poblada de Francia, es un importante destino turístico desde el siglo XIX y la rambla costera debe su nombre a un reverendo inglés y a su cuñado que crearon a partir de 1824 un primer camino de tierra, que se irá ampliando y embelleciendo durante las siguientes décadas.
En 1860, Niza, hasta ese momento vinculada al reino de Cerdeña, pasó a territorio francés.
En la “Belle époque”, Niza vive su apogeo gracias a un público cosmopolita. Muchos aristócratas frecuentan la ciudad, atraídos por sus plácidos inviernos. Hacia 1880, inspirado en el modelo inglés, un casino de formas orientales se levanta en un muelle sobre el mar.
A partir de los años 1920, el turismo de verano empezó a aparecer en la Costa Azul, impulsado por ilustres expatriados estadounidenses como el escritor John Dos Passos.
Cientos de edificios, algunos de ellos art decó, se construyeron entre las dos guerras mundiales en la ciudad, que acoge a numerosos artistas, músicos y escritores.
Hoteles de lujo, casinos y palacios abrieron sus puertas. En 1912, el rumano Henri Negresco mandó construir el palacio más mítico de Niza. Poco después, el inglés Henry Ruhl creó un hotel que lleva su nombre, donde se sitúa actualmente el Méridien.
Otros hoteles aumentaron la reputación del Paseo de los Ingleses, como el Palacio del Mediterráneo, cuya fachada está catalogada como monumento histórico, así como la cúpula del Negresco.
El Paseo de los Ingleses alberga también eventos festivos como el célebre carnaval o la batalla de las flores.
Niza, situada cerca de la frontera con Italia y el principado de Mónaco, atrae cada año a unos cuatro millones de visitantes.
Sin embargo, la ciudad registra una cifra de desempleo superior a la media francesa (15% en 2013 frente al 10% en toda Francia).
Esta ciudad cuenta con 342.000 habitantes, lo que la convierte en la quinta más poblada de Francia después de París, Marsella, Lyon y Toulouse, reseña AFP.