Con la asesoría de la Cámara de Comercio Venezolano-Italiana, Cavenit, el restaurante el Bistrot de la Cuadra llevó a cabo el Primer Festival Gastronómico Italiano: Napoli, que desde el 21 hasta el 23 de julio convocó a una gran asistencia de público y mostró que la bella capital de la región Campania tiene una de las gastronomías más variadas de Italia y Europa.
Nota de prensa
Massimo Santelmo, propietario del acogedor local que se encuentra ubicado en la Cuadra Gastronómica, nos comentó que luego de una remodelación que necesitaba el lugar comenzó a realizar una serie de eventos que combinaran il buon mangiare con la música.
“Mi esposa, Cristina Vogeler, y yo venimos del mundo de la música, nos conocimos cuando ambos participábamos en la Schola Cantorum de Caracas, aprovechando el espacio que resultó de las modificaciones que hicimos a nuestro local, iniciamos una serie de eventos musicales con el tema de las catas”.
La buena acogida que tuvo este tipo de actividades animó a Santelmo a cristalizar la idea del festival gastronómico italiano.
“Pienso recorrer poco a poco la geografía italiana con su variada gastronomía. Empezamos en Nápoles porque yo nací en esa maravillosa ciudad, sin embargo vivo en Venezuela desde que tenía un año de edad. Pero quería regresar a mis raíces”.
Explicó que para la elaboración del menú solicitó, como afiliado, la asesoría de la Dirección de Eventos de Cavenit, que diseñó la preparación de ocho platos que mostraran al público la riqueza de la comida napolitana.
“Si uno investiga la historia gastronómica de Nápoles, nos daremos cuenta que ha sido una ciudad que ha tenido una influencia de muchas culturas a lo largo de los siglos. Su cocina es muy ecléctica”.
Subrayó además que se hizo hincapié en la preparación de recetas que representan el alma del pueblo napolitano.
“Como toda ciudad italiana, Nápoles ha vivido tiempos difíciles y su gente ha tenido que arreglárselas para poder comer. ‘Ce arriagiamo’ significa nos arreglamos. En ese arrangiarsi ha logrado crear con pocos recursos platos muy sabrosos”.
Veriozka Marcano, directora de Eventos de la Cámara de Comercio Venezolano Italiana, dirigió la preparación de los ochos platos degustados. La primera entrada consistió en un Tris de antipastos compuesto de pimentones asados, calabacines bb en escabeche y bocconcino di mozzarella. El Misto de pesce se presentó en el característico conito de papel, tal como se come en la costa de la bahía de Nápoles.
Las Linguine alle vongole y la popular Pasta de fagioli fueron las tercera y cuarta entrada. La cocina del mar dio paso a la de las montañas con las Braciole di manzo (que son unos enrollados de carne en sala) y unas Salsicce con escarola.
Los platos salados culminaron con un Gattò di patate con tocineta y finas hierbas. La famosa Sfogliatella riccia fue el postre de la velada, la cual se sirvió con un Spumante Astoria.
El Pinot Grigio Placido y el Rosso Piceno fueron los vinos escogidos para acompañar el octeto de platos ofrecidos en el festival.
“Quisimos presentar una muestra de los platos más simbólicos de la comida napolitana tradicional, algunos de ellos no muy conocidos fuera de la región”, explicó Veriozka Marcano.
