La atleta Yulimar Rojas y el esgrimista Rubén Limardo centran las esperanzas de Venezuela de figurar en el medallero de los Juegos Olímpicos de Rio-2016, y agrandar la cosecha histórica del país de 12 preseas.
AFP
Las autoridades deportivas han evitado hacer proyecciones de medallas de cara al evento, pero los comentaristas coinciden en que la especialista en salto triple y el espadachín son los llamados a subir al podio.
Venezuela “vive su mejor momento en el deporte”, dijo recientemente el ministro del ramo, Mervin Maldonado.
El veloz crecimiento de Rojas en el salto triple, con una marca de 15,02 metros este año, despierta altas expectativas.
“Yulimar tiene gran oportunidad de ganar una medalla olímpica. Prefiero ser cauteloso, porque no me gusta meter presión, pero estamos soñando con un podio olímpico y tenemos mucha confianza en ella”, dijo Marcos Oviedo, vicepresidente de la Federación Venezolana de Atletismo, a la AFP.
Limardo también es visto como candidato para colgarse un metal, tras haber ganado el oro en espada individual en Londres-2012.
Aspira a reeditar ese logro en Rio-2016, si bien la historia atestigua la complejidad del objetivo: el cubano Ramón Fonst es el único esgrimista que ha logrado dos medallas de oro olímpicas.
Además, Fonst alcanzó la hazaña hace más de un siglo, en París-1900 y San Luis-1904.
Limardo también se plantea brillar en la espada por equipos, con una representación que completan su hermano Francisco y Silvio Fernández. Kelvin Cañas es el reserva.
Desde que comenzó a participar en los Juegos Olímpicos, en Londres-1948, Venezuela ha ganado 12 medallas olímpicas: dos de oro, dos de plata, y ocho de bronce.
También conquistó un oro y un bronce en el taekwondo de Barcelona-1992, pero no entran en la cuenta porque se trataba entonces de una disciplina de exhibición.
La edición olímpica con mayor número de preseas para Venezuela (tres bronces) fue la de Los Ángeles-1984, evento boicoteado por la desaparecida Unión Soviética y Cuba, entre otros países del viejo bloque comunista.