Cada vez más precaria es la situación de los insumos y reactivos en el laboratorio del hospital Luis Razetti de Barcelona, según informó el presidente del Colegio de Bioanalistas en el estado Anzoátegui, Alexis Irigoyen, quien aseguró que actualmente el principal recinto de salud del oriente del país no tiene ni para una hematología completa. Así lo reseña eltiempo.com.ve / María Gabriela García
Los análisis más básicos que deben realizarse los pacientes para que los médicos puedan hacer diagnósticos o controles, no se están afectando en el hospital por falta de reactivos y diluentes, indicó.
“No se hacen transaminassas, coagulación, orina, heces, Vdrl, no hay urea”, explicó el bioanalista.
Irigoyen dijo que hasta horas de la tarde del pasado miércoles duró un diluente que donó el hospital de Aragua de Barcelona, con el que se pudieron hacer algunas hematologías, pero sólo las estrictas emergencias.
Añadió que ahora esperan nuevo envío de la sustancia que fue ofrecida por el hospital de Anaco para resolver los casos de mayor premura.
Ni el material
“Ni los tubos se los entregan” dijo Irigoyen, sobre los contenedores de las muestras, para que los familiares las lleven a laboratorios privados.
Los parientes de quienes están hospitalizados y requieren algún estudio deben ir a un laboratorio privado y luego de corroborar que estén realizando el respectivo examen, solicitar el tubo para tomar la muestra, llevarlo al Razetti y volver a entregar el material que se va a analizar.
Esto, a su juicio, no sólo representa un esfuerzo físico, sino además un importante gasto de dinero. “La mayoría de los pacientes que asisten al hospital es porque son de muy bajos recursos”.
El dirigente gremial resaltó que quienes tienen mayores dificultades son aquellos que necesitan estudios de emergencia en horas de la tarde o de la noche, y que, según comentó, deben pagar varios taxis, buscan el tubo, la muestra y luego llevar el material.
“No hay nada”
Diana Sosa, quien tiene a su esposo internado en el Razetti, afirmó que ella se ha hecho cargo de todos los gastos de estudios que ha necesitado su compañero, ya que, según aseguró, en el universitario “no hay nada”.