El Ministerio Público acusó a la asistente de la Unidad de Compras del Hospital Tulio Carnevalli del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) en Mérida, Yuli Coromoto Paredes Silva (51), tras su presunta responsabilidad en el hurto de 33 cajas de suturas médicas.
Esta irregularidad fue denunciada el pasado 10 de junio por directivos del mencionado centro de salud ante la subdelegación local del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Los fiscales 19ª y auxiliar de la referida jurisdicción, Jackeline Barrios y Alexis Sánchez, respectivamente, acusaron a Paredes Silva por la presunta comisión del delito de peculado doloso impropio, previsto en la Ley contra la Corrupción.
En el documento introducido en el Tribunal 3º de Control de la entidad federal, los fiscales del caso solicitaron la admisión de la acusación, el enjuiciamiento de la mujer y que se mantenga la privación de su libertad.
En la respectiva denuncia del pasado 10 de junio, también se reportaron las sustracciones de 43 dispositivos intrauterinos (denominados T de cobre) y lotes de espéculos vaginales, catéteres y otros materiales ginecológicos y anticonceptivos adquiridos en el año 2015, los cuales habrían sido desviados a una clínica privada de la región.
Frente a las evidencias, el Ministerio Público solicitó la orden de allanamiento a la residencia de Paredes Silva, que fue materializada el pasado 14 de junio. En el lugar, los funcionarios del Cicpc localizaron 33 cajas de suturas médicas, cuya tenencia no pudo ser justificada por la fémina.
En consecuencia, la asistente de la Unidad de Compras del Hospital Tulio Carnevalli del IVSS en Mérida fue aprehendida y puesta a la orden del Ministerio Público.
MP