Los marabinos y residentes de la Costa Oriental del Lago viven en zozobra dentro de urbanizaciones. Grupos de vándalos atracan día o noche, sin que entes policiales actúen, reseñó Panorama.
Por Yesibeth Rincón
En las urbanizaciones Urdaneta, San Jacinto, La Floresta, La Rotaria, Cuatricentenario, San Miguel y San Rafael, entre otras, los robos han sido masivos.
Franklin Rincón, mecánico y residente de la “Urdaneta”, contó que los vecinos “no podemos con la inseguridad. Pasan en motos para quitarte celulares o lo que lleves encima. Roban a las 2:00 pm, a las 7:00 pm, a toda hora”.
Señaló que en la noche y madrugada se meten en las casas y amarran a las familias. “Casi siempre es un hombre y una mujer y una vez adentro los amarran y llaman a un camión para llevarse todos los ‘corotos’. ¡No aguantamos más esto!”, exclamó.
Allí en la “Urdaneta se registran en promedio 17 robos semanales en las residencias, señaló Paula Urdaneta.
“Hace una semana me robaron la bomba del agua. Son cuatro grupos de ladrones que nos mantienen azotados. Burlan los cercos eléctricos, se meten por los techos e, incluso, abren huecos en las paredes”, relató.
Otra afectada, María Pérez, ama de casa, aseguró que los vecinos han decidido organizarse en grupos de vigilantes. “Los hombres hacen rondas por las calles porque no hay patrullaje. Hemos decidido velar nosotros mismos por la seguridad. Creamos un grupo en whatsapp y por allí nos comunicamos unos con otros cualquier irregularidad que veamos, tenemos palos, pitos, esta semana hemos evitado tres robos”.
Pero en San Jacinto, al norte de Maracaibo, la situación es similar. “Esto se ha convertido en el sitio predilecto de los choros para enfriar los carros. Ya es común conseguir en frente de las casas vehículos desvalijados (…)”, dijo Jorge Suárez, del sector 4. Otros señalaron que en los últimos meses se incrementó el robo de bombas de agua.
En la Costa Oriental del Lago tampoco se escapan. En Ciudad Ojeda se nota la ausencia de personas en las calles después de las 5:00 pm, como el caso de Yajaira Mavarez, quien opta por llegar a su apartamento antes de esa hora por temor a ser sometida por ladrones a la entrada, quienes amordazan y cargan con todos los objetos de valor del inmueble. Mientras que en el municipio Simón Bolívar, en zonas como Tía Juana, San Isidro o Colinas de Bello Monte, la gente no puede dejar solas las residencias y ni dormir tranquilos, porque se han instalado “rateros” que cargan con bombas de agua, baterías de carros y hasta se llevan los cauchos.
Al respecto, el gobernador Francisco Arias Cárdenas dijo que están planteando el relanzamiento del patrullaje inteligente. “Tenemos una aprobación de recursos para cauchos, baterías y repuestos de las patrullas. Vamos a relanzar el patrullaje, darle el máximo uso al 911 y trabajar en conjunto con la alerta temprana y los ciudadanos, eso nos va a ayudar a atacar el hampa delictual”.