A pocas urbes del mundo les pega tan bien el término “festivo” como a Río de Janeiro. Como también a ningún evento deportivo le viene tan de maravilla la clasificación de “fiesta” como a los Juegos Olímpicos. Entonces, disfrutar de la más reciente cita estival en la ciudad maravilla viene siendo un verdadero carnaval, algo que en Río cobra matices extraordinarios. Caribbeanewsdigital.com
Lo cierto es que el centro turístico de referencia por antonomasia de todo Brasil no es solo la primera ciudad sudamericana en acoger el evento multideportivo más importante del mundo, sino también un escenario fascinante que va más allá de los tópicos del Carnaval, la sensualidad de las playas de Copacabana e Ipanema o de la voluptuosidad del baile a ritmo de samba.
Son muchos los atractivos de esta hermosa urbe, elementos que enamoran al visitante y complementan la singularidad de un suceso como las Olimpiadas que, sin duda, respiran y cobran vida también por la ciudad que las acoge.
El Cristo Redentor es la estatua art decó más grande del mundo. ¡Sus 30 metros superan casi cinco veces el récord olímpico masculino de salto con pértiga, en poder del francés Renaud Lavillenie, con 5,97 metros! Entre las mujeres la primacía es de la rusa Yelena Isinbayeva (5,05).
Diez mil quinientos atletas participarán en esta cita estival y 20 medallas olímpicas a lo largo de toda su historia hacen del voleibol de playa el deporte más exitoso de Brasil. Las entradas a los eventos de los actuales Juegos Olímpicos cuestan entre 5,50 y 1259 euros. El monto definitivo de la cita se estima en unos 10 700 millones de euros.
Río de Janeiro tiene el tamaño de París, Madrid y Viena juntas, con un total de 1182 kilómetros cuadrados. Una de cada cinco personas de esa ciudad vive en favelas. El famoso estadio de Maracaná, que será sede de la inauguración de la Olimpiada, tiene el récord de espectadores para un evento deportivo, cuando 200 mil personas vieron el partido entre la selección local y Uruguay.
La ciudad ostenta una variada oferta cultural, avalada por 79 museos, 133 teatros y 162 cines. Para los turistas que gustan de la bebida no está de más saber que una auténtica Caipiriña lleva 5cl de cachaza. Igualmente, 55 kilómetros de playa significan mucho atractivo para los amantes del sol y la arena, así que hay sobra el terreno para explorar una extensísima área que, como dato curioso, estuvo bajo la prohibición de que las mujeres llevaran tangas entre 1974 y 1976. ¡Menudo contraste con la realidad de hoy en día! En invierno las playas tiene una temperatura promedio de 22 grados celcius, mas en verano ronda los 26, perfecto para darse un chapuzón.
La forma tradicional de saludar en Río es con dos besos, pero en las mejillas, no se embullen. Por toda la ciudad existen 450 kilómetros de carriles de bicicleta, una buena manera para trasladarse y hacer ejercicios en medio del ambiente deportivo. No obstante, un billete de transporte en ómnibus cuesta 4,10 reales, o sea, 1,10 euros. Según datos de la Confederación Nacional de Comercio de Bienes, Servicios y Turismo de Brasil, durante el evento deportivo se generarán ingresos por 2,700 millones de reales, es decir, unos 830 millones de dólares, sobre todo por gasto de turistas.