La Organización StopVIH como defensora de los derechos humanos y en su misión de apoyar a los grupos vulnerables por condiciones de salud, hizo público su rechazo a la intención del Gobierno nacional y regional de que el Hospital Central “Dr. Luis Ortega” de Porlamar sea destinado para uso exclusivo de la Cumbre de los Países No Alineados.
“No se puede tapar el sol con un dedo, podrán aislar a los delegados en hoteles, restaurantes, y hasta pasearlos solo por vías bien sembradas y pintadas, pero la salud de los venezolanos está por encima de todo y no puede jugarse con la vida de los venezolanos”, asentó el Presidente de StopVIH, Jhonatan Rodríguez, considerando que la estrategia de atención en salud para la Cumbre ubica a los neoespartanos como ciudadanos de segunda, al obligarlos a abandonar el principal recinto médico asistencial y diseñar acciones temporales por la Cumbre sin considerar las vicisitudes que a diario vienen registrando los habitantes de la región.
Rodríguez destacó que pacientes recluidos en el nosocomio le han comunicado su preocupación porque si en el hospital son atendidos con mucha deficiencia temen que en otro lugar se puedan morir, por lo que se organizarán para que el Gobierno les informe por escrito la situación y se responsabilice ante las derivaciones que para su salud pueda tener estas decisiones excluyentes porque “la salud no es una dádiva, es una obligación constitucional y el Estado tiene que respetar y cumplir con ello”.
En efecto Rodríguez sentenció que el plan infringe la legislación vigente en Venezuela, pues la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece el derecho a la salud y a la vida y el plan estaría vulnerando este derecho al prohibir que la ciudadanía neoespartanas haga uso del principal hospital de la entidad solo para aparentar ante delegaciones extranjeras, y alertó a todas las personas que trabajan en instalaciones donde tendrán cabida los eventos relacionados con la referida Cumbre a que estén alertas, para que bajo ninguna circunstancia permitan que se violen sus derechos y se les obligue a realizarse la prueba de VIH sin consentimiento, ya que es un acto tipificado de discriminación y por tanto violatorio de la legislación venezolana vigente.
Asimismo, consideró un descaro que la Autoridad Única de Salud del Estado informe que en la entidad existen solo 6 ambulancias para atender la necesidad de una población de más de 600 mil habitantes, y que traerán 50 solo por la Cumbre, eso significa que el Gobierno niega sin vergüenza los recursos a los neoespartanos.
“Margarita siempre ha sido sede de eventos de gran importancia y magnitud y por primera vez se pretende algo similar, eso evidencia que la red de salud regional está cayéndose a pedazos, lo cual es un atentado a la vida de la población residente, además el Hospital Luis Ortega pertenece al IVSS por tanto a todos los venezolanos y no tiene por qué ser exclusivo para un grupo de personas, por el contrario muy mal quedará el Gobierno si mientras niega la existencia de una crisis humanitaria informe en la agenda de preparativos que reservará solo un centro asistencial para atender los casos de la Cumbre porque los demás no tienen el equipamiento necesario, ni siquiera el hospital militar está operativo al 100%”.