A las 2:00 de la tarde, Jennys finalmente ingresa a la habitación muy adolorida y conoce a su bebe. Pero fue breve el encuentro entre madre e hija y ni siquiera la pudo amamantar por una única vez, reseña La Verdad de Vargas.
Por Doriana León
Sandoval señala que luego de varios intentos fallidos de las enfermeras por parar el sangrado, a las 4:00 de la tarde su mujer comenzó a supurar sangre por la herida.
Esto obliga a la doctora Ramos a regresar al centro de salud para atender a la paciente. “Llegó, la revisó y me dijo que me tranquilizara que eso era normal. Le mandaron a hacer exámenes de laboratorio y la hemoglobina la tenía en 7, mientras que en el preoperatorio le había salido en 14”.
Al ver que la sangre no cesaba y Jennys estaba cada vez más débil, la obstetra decidió regresarla a quirófano. “Estuvieron como hasta las 6:30 de la tarde, cuando la doctora salió desesperada diciendo que debía conseguir una ambulancia urgente, pues mi esposa necesitaba una transfusión y en la clínica no tenían banco de sangre”.
Los Bomberos, Protección Civil y el 171 fueron algunos de los cuerpos de seguridad a los que la familia Campos Sandoval llamó para solicitar una ambulancia, sin obtener respuesta.
“La doctora estaba muy nerviosa y me ofreció trasladarla en su camioneta. La llevamos hasta el Seguro Social de La Guaira, donde falleció a los 20 minutos de su ingreso”.
De acuerdo al resultado de la autopsia realizada por forenses del Cicpc, la mujer murió por un shock hipovolémico (pérdida grave de sangre).
El cónyuge de la víctima llamó a la ginecóloga, quien aseguran se retiró del Seguro Social apenas dejó a la paciente, para reclamar una respuesta a lo ocurrido. “Me dijo que son cosas que pasan y que mi esposa tenía un útero delicado”.
Además de la cesárea a Jennys le habían realizado una esterilización quirúrgica. Por el procedimiento, la clínica cobró Bs. 242 mil de los cuales 150 mil bolívares fueron cubiertos a través de la póliza de seguros de la cual goza Sandoval por su trabajo como seguridad aeroportuario en el Iaim, y los otros Bs. 92 mil fueron cancelados en efectivo.
“Nunca pensamos que pagando una clínica íbamos a terminar enfrentando esta dolorosa situación. Somos de escasos recursos e hicimos el sacrificio para pagar la clínica con la fe de que todo saldría bien”.
Se conoció que esta semana, funcionarios de la Contraloría Sanitaria acudieron con representantes de la Fiscalía y de la Policía Científica a la clínica El Cristo, donde pudieron constatar que la sala quirúrgica no cumple con las normas para su uso y ordenaron su cierre indefinido.
“No tienen banco de sangre, carecen de planta eléctrica y hay filtraciones dentro del quirófano”, dijo un inspector de salud que prefirió el anonimato.
Se trató de obtener la versión de la clínica, pero negaron el acceso al centro de salud, al equipo reporteril.
Funcionarios del Cicpc ya iniciaron las investigaciones del caso en el que se ve comprometida la obstetra que atendió el proceso quirúrgico. La joven madre deja hermanas a tres hijas menores de edad.