El disidente cubano Guillermo Fariñas, en huelga de hambre y sed desde hace 39 días, está nuevamente en su casa y “con ánimo” tras ser hospitalizado por cuarta vez desde que comenzó su protesta y recibir tratamiento de rehidratación intravenosa, informó hoy a Efe un colaborador cercano.
Fariñas regresó a su domicilio en la tarde del sábado, tras permanecer durante más de seis horas internado en una unidad de cuidados intensivos del Cuerpo de Guardia del hospital provincial “Arnaldo Milián Castro” de la ciudad central de Santa Clara, donde reside, explicó por teléfono su portavoz, Jorge Luis Artiles.
El opositor perdió el conocimiento ayer sábado y fue trasladado por sus familiares al hospital, donde llegó con “acidosis metabólica”, debido al prolongado ayuno que mantiene, indicó Artiles, miembro del grupo opositor ilegal Foro Antitotalitario Unido (Fantu), liderado por Fariñas.
“Le suministraron sueros de lactosa, dextrosa, clorosodio y vitaminas, pero tenía muy altos el sodio y el potasio en sangre, por eso demoró en estabilizarse”, detalló la fuente.
Artiles dijo que Fariñas “hoy ha amanecido con ánimo” y recibió al segundo jefe de la embajada de los Estados Unidos en Cuba, Scott Hamilton, quien “vino a interesarse por su estado y estuvo alrededor de una hora y media conversando con él”.
De acuerdo con el portavoz de Fantu, Fariñas manifestó al diplomático estadounidense que “se mantendrá en la huelga hasta que el Gobierno de Cuba se pronuncie por sus exigencias”.
Guillermo Fariñas, premio Sájarov 2010 del Parlamento Europeo por la defensa de los derechos humanos, comenzó este ayuno el pasado 20 de julio para exigir al Gobierno cubano el cese de la represión contra los disidentes y un diálogo con la oposición.
La semana pasada miembros del grupo Fantu pidieron al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que realizara una “acción salvadora” y que hiciera uso de “su sagacidad política” para preservar la vida de Fariñas.
En los últimos días, el opositor también fue visitado por representantes de la Embajada de Alemania y de la Delegación de la Unión Europea (UE), y una consejera de la Embajada de EE.UU. y anteriormente acudieron a verlo altos cargos de la Iglesia católica en Cuba.
Guillermo Fariñas, de 54 años, acumula desde 1995 un total de 25 huelgas de hambre con la actual, la última hasta ahora en 2010, cuando hizo cien días de ayuno, la mayor parte de ellos hospitalizado, para pedir al Gobierno la liberación de un grupo de opositores presos enfermos.
El Gobierno de Cuba considera a los disidentes “contrarrevolucionarios” y “mercenarios”. EFE