No cabe duda que la manifestación del primero de septiembre, fue un gran éxito, Caracas fue testigo de la concentración más grande de nuestra historia, más de un millón de personas se congregaron para exigir que el CNE cumpla con su obligación de facilitar una consulta electoral.
Lo ocurrido ese día es solo el principio de una serie de acciones que deben conducirnos a la realización oportuna del Referendo Revocatorio, los ciudadanos debemos tomar las calles de todo el país hasta lograr nuestro objetivo. Las manifestaciones que en paralelo se realizarán en diferentes ciudades del país este miércoles, deben contar con un respaldo popular tan contundente como la Toma de Caracas.
La lucha, pacífica, democrática y en la calle puede ser un camino difícil, lleno de obstáculos y contratiempos, pero es el camino que debemos recorrer quienes por convicciones democráticas no queremos producir muertes y destrucción, además es el camino donde tenemos la ventaja, porque tenemos a la mayoría de la población de nuestro lado.
La MUD y todos quienes acompañamos esta gesta heroica, debemos hacer frente a las amenazas y la campaña de represión que ha iniciado el gobierno, aunado a la difusión de mentiras y engaños a través de todos los medios que tienen a su alcance.
La represión no tuvo éxito, la gente salió de forma masiva a pesar de las detenciones y arbitrariedades que ejecutó el oficialismo en los días previos y las mentiras llegaron a un punto absurdo donde solo quien las emite puede llegar a creer por ejemplo: que las imágenes de calles atiborradas de gente corresponden solo a 30mil personas que salieron a manifestar.
Esta lucha de calle, pero pacífica, no solo tiene al gobierno tan nervioso que recurre al autoritarismo más primitivo, sino que tiene muchos detractores entre quienes desean el mismo fin que nosotros, pero quieren tomar los “atajos” de la violencia. A esos compañeros les decimos que por convicción no deseamos el camino de la muerte, pero además por razones practicas no debemos trasladar la lucha al único terreno donde Maduro tiene la ventaja, por tener las armas, no solo de las FAN sino de todos los grupos violentos que han sido creados y financiados por ellos.
Nuestro mayor capital es estar del lado del 70% de la población que quiere cambio y lo lograremos utilizando todos los medios de protesta, en paz, pero con la rebeldía y contundencia que sean necesarios para derrotar la tiranía.