Habitantes de San Antonio del Táchira se quejan de lo difícil que resulta adquirir alimentos con precio regulado, las pocas veces que llegan, en ciertos supermercados de esta localidad, debido al desorden que predomina para ingresar a dichos establecimientos, situación que algunas veces es propiciada por el mismo personal encargado de la seguridad privada y guardias nacionales, que hacen presencia supuestamente para tratar de controlar el acceso de las personas, reseña La Nación.
Aunque no con la frecuencia deseada por la población, algunos abastos y supermercados de San Antonio, ciertos días de la semana son surtidos con productos de la cesta básica para ser vendidos a precio regulado.
Una vez tienen conocimiento de la existencia de los rubros, centenares de compradores madrugan a hacer la fila para tratar de adquirir los alimentos, pues el presupuesto familiar no alcanza para repagar los rubros a revendedores que los ofrecen en la misma población o para cruzar el puente internacional y comprar en los abastos y supermercados de La Parada, Villa del Rosario o Cúcuta.
En un establecimiento ubicado en pleno centro de San Antonio, perteneciente a una conocida red de automercados de la región, es común observar las largas filas de compradores, entre adultos jóvenes y adultos mayores, en procura de obtener los pocos productos que llegan a precio regulado.
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