El último ajuste de sueldos y bono de alimentación decretado por el presidente de la República, Nicolás Maduro, trajo consigo una noticia no muy grata para las personas que viven en conjuntos residenciales de la zona norte del estado Anzoátegui, reseña El Tiempo.
Y es que luego de producirse este incremento salarial, los administradores de condominios tuvieron que fijar nuevos montos de las mensualidades para poder pagar los servicios y al personal contratado.
El equipo de El Tiempo consultó con algunos para conocer las tarifas que fueron modificadas a partir de este mes.
Thais de González, presidenta del edificio Aragua en el conjunto residencial Eulalia Buroz, ubicado en el municipio Bolívar, señaló que antes del decreto presidencial los propietarios cancelaban 4 mil 800 bolívares mensuales.
No obstante, apuntó que ahora la cuota fue elevada a 6 mil bolívares. “Esto es para poder pagar todos los servicios, pero si hay un gasto adicional, el monto podría variar en los próximos meses”.
Según la encargada de este condominio, se generó un impacto “fuerte” en los 47 propietarios que hay en este edificio, producto del aumento de la mensualidad.
En la residencia Coco Guaica, también de Barcelona, la administradora del condominio, Elisa Salazar, apuntó que en agosto subieron el monto mensual de Bs 5.708 a Bs 6.180 para poder pagar el bono de alimentación, que entró en vigencia el mes pasado.
“Ahora la mensualidad puede que llegue a 8 mil bolívares porque hay que pagar también el sueldo mínimo de los trabajadores que prestan servicio a la residencia. Aquí el gasto es menor porque no se contratan empresas adicionales para que hagan mantenimiento u otra cosa. Simplemente, se les paga a algunas personas que sean realmente necesarias”, explicó Salazar.
En Sotillo no escapan de este aumento. Carolina Martínez, habitante de Terrazas del Sol, en el sector Pascal, expresó que el monti mensual destinado al pago de servicios comunes en la residencia es de Bs 9.000, por apartamento.
Indicó que el incremento de salarios decretado por el Ejecutivo nacional provocó un ajuste de Bs 2.000 en el monto, que hasta el mes de agosto fue de Bs 7.000.
La propietaria dijo que pese a los altos precios, algunos servicios han desmejorado, pues asegura que desde el año pasado se ha hecho difícil hacerle mantenimiento a la piscina, por las deficiencias del agua, la escasez y elevados costos de los químicos.
Los habitantes de Pascal I y II aseguraron que desde hace más de tres años no cuentan con servicio de vigilancia.
Para la limpieza de los pasillos y escaleras de los edificios contratan a una señora que realiza el aseo dos veces a la semana, porque pagarle a una empresa escapa de su presupuesto.
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