Venezuela decidió cambiar y el Consejo Nacional Electoral sigue impidiendo que el cambio llegué de manera cívica, pacífica y electoral. Según los estudios de opinión el referendo revocatorio cuenta con 82% del apoyo del pueblo venezolano, pero el Poder Electoral sigue saboteando el deseo de los ciudadanos de transformar el sistema que nos Gobierna.
Para que el revocatorio entre en su última fase de activación es necesario que el CNE anuncie la fecha de recolección del 20% de las firmas, lo que equivale a tres millones 900 mil venezolanos, quienes deben acudir a los centros de votación que disponga el órgano electoral para manifestar su voluntad de revocar a Nicolás Maduro.
Aun es un secreto a voces que para finales del mes de octubre será la recolección del 20% de las firmas, sin embargo, las condiciones para la manifestación de voluntades están en medio del debate, el CNE está reeditando las dificultades y trabas que impuso durante la recolección del 1% para obstaculizar el proceso.
Se ha conocido que las rectoras del CNE quieren que el 20% de las firmas sea por cada estado, pero esto atenta contra el artículo 72 de la Constitución donde se establece que: “…Transcurrida la mitad del período para el cual fue elegido el funcionario o funcionaria, un número no menor del veinte por ciento de los electores o electoras inscritos en la correspondiente circunscripción podrá solicitar la convocatoria de un referendo para revocar su mandato”.
La solicitud es para revocar el cargo del Presidente de la República, por lo tanto, la circunscripción es nacional, no tienen que dividirlo por entidades, pero las “comadres” del CNE quieren obstaculizar el proceso y habilitar los centros de votación en zonas de difícil acceso, con altos índices de inseguridad, deficientes servicios públicos, colocar poca cantidad de máquinas para desmotivar a los ciudadanos y que no se logre el 20% de la manifestación de voluntades. Los venezolanos y la Unidad Democrática no pueden aceptar esta trampa que plantea el ente electoral.
Basta de que el CNE asuma el referendo revocatorio como algo propio, tienen que respetar la voluntad popular y cumplir con la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. El revocatorio es de la gente y no podemos asumir estas condiciones desfavorables especialmente para el pueblo, quienes tendrían que hacer largas colas para manifestar su voluntad de revocar a Nicolás Maduro.
Si el CNE insiste en trancar las vías electorales, los venezolanos tenemos que asumir la calle para salir de la crisis. Debemos organizar un movimiento mayor al del primero de septiembre, un movimiento de lucha cívica que este en la calle el tiempo que sea necesario para conquistar nuestros derechos.
En Venezuela no habrá cambio que no arranque con organización y presión de calle.
Sigamos avanzando con determinación ¡Fuerza y Fe!
@AngelMachado10