El presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup visitó las instalaciones del diario Panorama a propósito de su paso por la entidad zuliana como parte de las asambleas de ciudadanos enmarcadas en la denominada “Toma de Maracaibo” rumbo al Referendo Revocatorio.
Con información de Yesibeth Rincón / Panorama
En ese sentido, Ramos Allup fue consultado sobre la posible intervención del Vaticano en un diálogo entre el Gobierno y la Unidad Democrática. “El Gobierno quiere escapar del veredicto popular”, dijo refiriéndose al Referendo Revocatorio.
A continuación la entrevista:
—Con la incorporación del Vaticano, ¿cómo está el diálogo?
—Está exactamente igual, antes o después del Vaticano. Los mediadores ni fijan reunión, ni establecen agenda ni producen veredictos, son facilitadores, partes de buena fe que procuran acercar para ver si se sientan a conversar sobre los temas de interés común, que son los temas del país. Por supuesto que la oposición tendría en su eventual agenda el respeto a la Constitución, la separación de poderes, el tema del referendo revocatorio en 2016, derechos humanos, libertad de expresión, es decir, lo que hemos venido sosteniendo para que se restablezca el orden constitucional. Si el Gobierno invita al Vaticano para un entendimiento, bienvenido, nosotros estamos dispuestos a dialogar, pero no lo haremos con una pistola puesta en la cabeza, ni vamos a aceptar el diálogo en un momento en el cual el Gobierno se quiere escapar del veredicto popular. Cada sector tiene sus propias exigencias y presiones, desde la oposición hay quienes cuestionan cualquier diálogo en este momento; de parte del Gobierno también.
No puedo hablar por la Mesa, yo lo que puedo dar es una opinión, pero si me consultaran si ir a diálogo o no, yo no iría a diálogo con el Gobierno en este momento, porque en definitiva el que no quiere diálogo es el Gobierno.
—¿Cómo se va a un diálogo sin expectativas?
—Expectativas hay, pero una cosa es eso y otra que se materialice. Para mí el objetivo y propósito de la oposición y del país en este momento es el referendo revocatorio en 2016, y cualquier evento que tienda a desviar la atención de ese propósito fundamental, o a enfriar o a arrojar alguna posibilidad de duda, yo me niego rotundamente a eso.
—¿Qué pasaría si fuera en el 2017?, ¿irían igual a referendo ese año?
—No te puedo contestar eso, porque cuando se me pregunta por el plan B, o C, o el plan D, yo no sé qué es eso, porque hacerlo en el 2016 es nuestro plan A, Y y Z. Si el Gobierno lo impide o lo frustra, y para eso viola la Constitución, ya veremos qué hacemos.
—¿Y las elecciones de gobernadores?
—Algunos de oposición dicen: ‘Y por qué no hablan de la elección de gobernadores’, pero claro que hemos hablado de esas elecciones (…) Los gobernadores del Psuv se alzaron y le dijeron a Maduro: ‘Si no te cuentas tú, no nos contamos nosotros’, y ahí decidieron matar la elección regional. Les quiero decir que para nosotros no hay disyuntiva entre esto o aquello, es esto y aquello, el referendo y elección regional, para la cual no hay que recoger firmas. Cuando se propuso un mecanismo, la idea que se hizo viral fue el revocatorio, la idea pegó, entonces, si la cosa se hizo viral y la opinión iba por allí, nos fuimos por allí.
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