La decisión del CNE no debe sorprendernos. Después de la paliza que recibieron los chavistas el 6D, no pueden permitir más elecciones.
Tampoco debe sorprendernos la actitud blandengue de la MUD. Sus lideres nunca han escondido lo que son: una plataforma electoral, buena para buscar votos, pero muy mala para combatir dictaduras.
La buena noticia es que ya sabemos dónde estamos parados. Se acabaron las falsas ilusiones. Por fin todo el país comprende que no hay salida electoral.
Pero, afortunadamente, existe un Plan B, diseñado por alguien que sí tiene experiencia enfrentando dictaduras: el Dr. Enrique Aristeguieta Gramcko.
Todos debemos presionar a la Asamblea Nacional para que promulgue el Decreto Gramcko, o sea, para que remueva a Maduro del cargo, por su nacionalidad colombiana; y, seguidamente, debemos salir todos a la calle hasta que Maduro y su combo se vayan.
Insisto, todos nuestros esfuerzos deben ir orientados a presionar a la AN, porque los diputados tienen terror de destituir a Maduro, pese a que todos ellos reconocen públicamente que es colombiano.
Después de que los diputados cumplan con su deber, entonces nos tocará a nosotros apoyarlos, saliendo a la calle masivamente y haciendo llamados al sector institucional de las Fuerzas Armadas para que defienda la Constitución.
A partir de hoy, están dadas todas as condiciones para que se produzca un nuevo 23 de enero. No lo desaprovechemos.
@LuisSemprumH