La derecha en el Congreso mexicano rechazó este miércoles la propuesta del presidente Enrique Peña Nieto para garantizar en la Constitución el matrimonio entre personas del mismo género.
“La iniciativa proponía una ampliación de derechos del artículo cuarto constitucional”, explicó a la AFP el diputado Guadalupe Acosta Naranjo. “La redacción decía que el matrimonio es entre personas y no en la concepción antigua de que sólo es entre hombre y mujer”, añadió el congresista de izquierdista.
De acuerdo al diario de debates del Congreso, los diputados de los partidos Acción Nacional (PAN), Verde (PVEM) y Encuentro Social (PES) votaron en contra argumentando que esa modificación no le corresponde al Congreso federal sino a cada uno de los congresos locales, pues se trata de la materia civil.
“No tiene sentido hace 15 días nosotros votamos por unanimidad una ley que le daba atribuciones al Congreso para legislar en materia civil”, remarcó Acosta Naranjo, cuyo partido fue uno de los dos que votó a favor de la propuesta presidencial.
En contra votaron el PAN y el PVEM, que han declarado con anterioridad su filiación católica, además del PES el cual se asume como “el partido de la familia” y de identidad humanista cristiana.
En el caso del Partido de la Revolución Institucional (PRI), al cual pertenece el presidente Peña Nieto, el voto fue dividido. Siendo el momento más emotivo el discurso del diputado Benjamín Medrano Quezada, quien aseguró: “Ésta es una decisión personal, votaré en pro del dictamen porque va a favor de mi dignidad como ser humano, como homosexual y como diputado federal”.
En 2009 la capital de México fue la primera ciudad de América Latina en legalizar el matrimonio entre personas del mismo género y en 2015 la Suprema Corte de Justicia sentó jurisprudencia para legalizarlo en todo el país, sin embargo poco menos de la mitad de los estados lo han incluido en el código civil local. AFP