Las fuerzas de seguridad de Guyana permanecen en estado de alerta y con presencia reforzada en las calles después de que el Gobierno del país suramericano recibiera información de una posible amenaza a su seguridad interna. EFE
El Gobierno que encabeza David Granger divulgó un breve comunicado en el que se informa de que la decisión de reforzar hoy la vigilancia en varias áreas del país responde a haber recibido “información creíble” sobre esa amenaza y al incremento de la criminalidad en general en las calles del territorio suramericano.
El comunicado no detalla, sin embargo, de qué tipo es o el origen de la potencial amenaza a la seguridad de Guyana.
Granger anunció que la labor de vigilancia estará a cargo de la Policía y la Fuerza de Defensa de Guyana (GDF).
“Alertamos a la ciudadanía de que se podrán ver helicópteros sobrevolando ciertas áreas del país y más efectivos de lo habitual de la Policía junto a miembros de la GDF en las calles”, subrayó Granger.
“Pedimos a los ciudadanos que no se alarmen y que cooperen con las fuerzas de seguridad cuando sea necesario. La seguridad de todos los residentes y visitantes de Guyana es una prioridad para el Gobierno”, señala Granger en el comunicado.
Las fuerzas de seguridad registraron hoy la prisión de Georgetown como parte del operativo de refuerzo de la seguridad, lo que incluyó acordonar el área con un espacio de seguridad que incluyó agentes con armas largas.
La Policía, que estuvo acompañado por el Cuerpo de Bomberos, informó que el operativo de la prisión transcurrió sin incidencias y que la situación se mantiene en estado de normalidad tras el registro.
Las fuerzas del orden encontraron armas, teléfonos y drogas en anteriores registros llevados a cabo en el centro penitenciario.
El comunicado matiza que las operaciones hoy en marcha responden -además de a la amenaza no especificada- a un incremento de la criminalidad generalizado, ya que al menos dos establecimientos son robados de media cada día, a lo que hay que sumar otros muchos que no se denuncian.