Yang Liwei, el primer taikonauta, dijo en una entrevista reciente que había oído unos misteriosos golpes durante su vuelo en la nave Shenzhou 5. Yang realizó un vuelo de 21 horas alrededor de la Tierra en octubre de 2003, convirtiéndose en el primer astronauta del programa espacial chino (y convirtiendo a China en el tercer país que ha enviado hombres al espacio de manera independiente), reseña Gizmodo.
“Una situación no causal con la que me encontré en el espacio fue un sonido que aparecía de vez en cuando”, recuerda Yang. “No venía de fuera ni de dentro de la nave espacial, pero sonaba como si alguien estuviera golpeando el cuerpo de la nave como quien golpea un cubo de hierro con un martillo de madera”.
El sonido lo puso tan nervioso que se acercó a la escotilla para tratar de encontrar la causa. No vio nada fuera de lo común en el interior o el exterior del módulo Shenzhou. Al regresar a la Tierra le contó a los técnicos lo que había oído, pero nunca pudieron reproducir aquellos golpes ni encontrarles una explicación. Yang dice que jamás volvió a escuchar un sonido igual.