Lapatilla
No importa la edad que tenga, debes admitir que este “papi añejao” tiene un no sé qué, que qué sé yo que nos encanta.
Este madurito nalgón te robarán el corazón… ¡y hasta el aliento!
No importa la edad que tenga, debes admitir que este “papi añejao” tiene un no sé qué, que qué sé yo que nos encanta.
Este madurito nalgón te robarán el corazón… ¡y hasta el aliento!