Las organizaciones Acción Solidaria y Positivos en Colectivo, entre otras, denunciaron este viernes que Venezuela, desde hace al menos dos años, no cuenta con los reactivos necesarios para practicar las pruebas de control del VIH/sida, así como los materiales médicos para abordar los problemas asociados a la infección, reseñó EFE.
A estos problemas, señalan las organizaciones, se suman “los problemas de todos los venezolanos” como la escasez de alimentos y medicamentos.
El coordinador general de las organizaciones Positivos en Colectivo y Red de Personas con VIH, Mauricio Gutiérrez, dijo en entrevista a Unión Radio que hasta hace un par de años el acceso al tratamiento contra el avance del VIH “se había mantenido bastante bien”.
En la actualidad, dice, existe “el tema de la escasez, no solamente de medicamentos antirretrovirales, sino también de pruebas para el diagnóstico del VIH, las pruebas de carga viral (de virus) y CD4 (anticuerpos)”.
Indicó que desde septiembre pasado el sistema público de salud no admite citas para hacer las pruebas para verificar el nivel del virus causante del sida en el organismo “y la consecuencia es el desconocimiento absoluto de la condición real de salud de la persona”.
Gutiérrez dice que esta situación es especialmente grave “sobre todo cuando hemos tenido tantas y tan recurrentes fallas en la entrega de los medicamentos antirretrovirales” por parte del Estado que, por ley nacional, está obligado a cubrir los costos del VIH/sida a los venezolanos.
“Actualmente no hay la posibilidad de practicarse exámenes bajo ninguna modalidad, ni por emergencia, ni mujeres embarazadas, ni a niños ni a nadie”, aseguró.
El director ejecutivo de la ONG Acción Solidaria, Feliciano Reyna, recordó, que según el Ministerio de Salud de Venezuela 63.000 personas reciben el tratamiento contra el VIH/sida por parte del Estado y que el mismo ente oficial estima que cada año se suman unos 12.000 ciudadanos a la lista de los que viven con el virus.
En este sentido señaló que son, por lo menos, unas 75.000 personas que este último año no han podido hacerse estas pruebas para el seguimiento del progreso de la enfermedad con la regularidad indicada.
Reyna también comentó que recientemente se dio el caso de una portadora de VIH embarazada a la que los médicos le advirtieron que no la atenderían si llegaba la hora de la llegada de su bebé y ella no contaba con los materiales especiales que se requieren para atenderla pues en el hospital no los tienen.
Asimismo, narró la historia de una viuda, madre de dos adolescentes que vive con VIH y que en la actualidad come solo una vez al día para que sus hijos puedan comer.
El activista señaló que pese a este crítico panorama, hay muchas personas movilizadas para ayudar a los portadores de VIH/sida más necesitados y pidió al Gobierno asumir que en el país existe una “emergencia humanitaria” por la falta de alimentos, medicinas y materiales médicos que afecta a “millones de personas”.