Uno de los directivos de la empresa Faraday Future pasó la pena del siglo cuando en plena presentación de su primer vehículo eléctrico se “echó tres”.
En efecto, el majestuoso FF 91 les “ofreció” una sorpresa a todos los asistentes cuando se quedó completamente inmóvil luego de que le presionaran un botón.
“Solo hace falta presionar el botón y el coche encontrará el camino hacia el garaje”, aseguró el vicepresidente de la compañía, Nick Sampson, al inversor principal del proyecto, Jia Yueting.
“Parece que está un poco perezoso esta noche“,dijo Sampson para disimular el incidente.