El presidente Nicolás Maduro afirmó el miércoles que espera que en cualquier momento el gobierno de Colombia autorice el paso de vehículos a territorio venezolano para que se inicie la venta de gasolina a precios internacionales y de manera legal en zonas de la frontera con Colombia como parte de sus esfuerzos para evitar el contrabando.
El gobernante indicó que desde el 2 de enero la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) habilitó las estaciones de gasolina que operarán en moneda extranjera, incluyendo pesos colombianos. “Estamos listos y creo que en cualquier momento es autorizado por el Premio Nobel de la Paz Juan Manuel Santos”, dijo Maduro durante el acto de juramentación de más de una decena de nuevos miembros de su equipo de gobierno.
El tránsito de vehículos está restringido en la frontera común. Maduro había extendido hasta el 2 de enero el bloqueo de las fronteras venezolanas con Colombia y Brasil, que permanecían cerradas temporalmente desde el 12 de diciembre como una manera de contrarrestar el contrabando del papel moneda venezolano. Sólo el paso peatonal para la visita de los parientes estaba abierto en las zonas limítrofes con ambos países.
Maduro, sin dar otros detalles, agradeció a Santos “toda la colaboración que me está dando personalmente” para que se inicié pronto la venta de combustible.
Las primeras estaciones de servicio de PDVSA, autorizadas bajo un decreto especial para comercializar el hidrocarburo en divisas, están ubicadas en el poblado venezolano de Ureña, cercano a la ciudad colombiana de Cúcuta, y en el poblado de Paraguachón, a ocho kilómetros al oriente de la población colombiana de Maicao, ambas al extremo occidente del país.
Venezuela tiene la gasolina más barata del mundo, que se vende aproximadamente a un centavo de dólar por litro, lo que ha favorecido la creación de un mercado negro del combustible. PDVSA ha calculado que con el contrabando se pierden cerca de 100.000 barriles diarios de gasolina. AP