La rubia criticada por sus facciones árabes. La niña rebelde que llevó el reinado a su antojo. La bomba explosiva que a veces es amable y otras tantas distante. Sea como sea, a Mariam Habach le llegó el día y hoy le toca sacar sus garras para demostrar que es una fiera capaz de conseguir lo que quiere a como dé lugar, publica Panorama.
Por Nayib Canaán
Con 21 años, cumplidos el jueves, la larense, estudiante de odontología en Valencia, enfrenta el mayor reto de su vida: el Mis Universo. Y debe vencer a 85 contrincantes para traerle a nuestro país la octava corona del concurso de belleza más importante del planeta.
Mucho más “catira” que cuando ganó el Miss Venezuela, en octubre de 2015, y con una nariz perfilada gracias a su amigo el bisturí, la hermosa chica se hizo sentir desde que llegó a Manilas, Filipinas, donde se realiza la competencia, cuya final será transmitida esta noche, a las 8:00, Venevisión.
Apenas viajó al continente asiático llamó la atención por cómo fue vestida, pues Osmel Sousa decidió enviarla en ropa deportiva, como acostumbran ahora las celebridades. Luego, Habach se unió a las actividades de la organización con una serie de outfits que la mantuvieron siempre impecable, con prendas de diseñadores y un cabello y maquillaje impecable. Además, se vendió como una mujer fresca y amigable.
“La veo muy segura de sí misma, tiene una estampa imponente y el hecho de haber logrado tres importantes títulos o premios previos a la elección ya la hacen una ganadora y una muy fuerte candidata. El vestido azul y plateado creado por Nidal es hermoso y la hizo lucir imponente en la preliminar”, dijo a PANORAMA Diego Kapeky, conductor de Portada’s, quien además considera como rivales para Mariam a las candidatas de Filipinas, República Dominicana, Brasil, Tailandia y México.
La llamada Bomba dorada se ha comportado muy distinto a cómo era en Venezuela. Allá es abierta, divertida y eufórica con los medios de comunicación, mientras que aquí le controlaban las respuestas de sus entrevistas y hasta había una regla que era no tocarla a la hora de hacerse una foto con ella.
“Hablando desde mi experiencia con ella, las veces que me ha tocado entrevistarla, no creo que se corone mañana, y no es que esté desmeritando su desempeño en el concurso, que ha sido excelente como cualquiera de nuestras representantes de años anteriores, que siempre sonaron como grandes favoritas, pero en la noche final quedaron aplaudiendo a la ganadora. No creo que esté preparada para asumir la responsabilidad que implica ser miss Universo, tanto a nivel de compromisos con la organización, como con los fanáticos de los concursos de bellezas”, fue la opinión del zuliano Alexis Villarroel, corresponsal en Maracaibo del programa Boom (Venevisión).
Por su parte, Kapeky remató: “Debe entrar seguro en el cuadro de semifinalistas y dependerá de su desempeño el pase al top 5, en el que también la veo con muchas posibilidades. Ojalá no nos pase como con en los años de Marena Bencomo o Mariángel Ruiz, que nos quedamos con el olor a triunfo”.