ALTO
¿EL PADRINO?:
Tensa fue la reunión de gabinete en la que el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino, el mismo personaje que días atrás acusaba a la oposición democrática y a la Asamblea Nacional de generar “un clima de desestabilización” y desconocer a “las autoridades legítimas” (como si acaso no fueran las únicas que junto a su jefe Maduro fueron electas por el voto directo de los venezolanos y legitimadas por el Poder Electoral) tomó la palabra y causó roncha. Esta vez, dentro del doble discurso al que estamos acostumbrados con Chávez desde 1999, increpó al jefe del Sebin, el MG. González López para que cumpliera las decisiones del Ministerio Público y diera la libertad otorgada a decenas de los presos políticos del régimen -del que hace combo- y para quienes están emitidas boletas de excarcelación, entre las que hay algunas desde hace meses como el caso de Yon Goicoechea. Unas en poder del jefe de la policía política y otras en manos de los abogados ante la negativa a recibírselos. ¡Oh sorpresa!. Me cuentan que las caras de los siempre obsecuentes “ministros de a locha” eran para coger palco. Asombrados y sin guión. Padrino dijo que cuando a él le habían tocado casos similares el había respetado a la Fiscalía. El arbitrario, afectado por la petición respondió: “Yo solo obedezco órdenes de mi Comandante Supremo”. La reunión del gabinete se suspendió y se fueron a conversar con Maduro Moros los dos mayores generales, Padrino López y González López. Hasta allí lo que me contaron. Hoy todo sigue igual. ¿Quién es el “padrino” del cuestionado? ¿Serán esos presos parte del chantaje para obligar a dialogar a los demócratas con los diabólicos hermanitos Rodríguez instruidos por Maduro en cadena para montar de nuevo una mesa tramposa?. Recordemos que ellos fueron los primeros en “conversar en Dominicana” y desde allí quedó empavado ese “falso acercamiento”.
MEDIO
¿SORPRESA O CRUELDAD?:
Cáritas de Venezuela, con base en estándares internacionales y la asesoría y apoyo de un equipo debidamente entrenado, ha monitoreado sistemáticamente la situación nutricional en niños menores de 5 años en 4 entidades federales: Dto. Capital, Zulia, Vargas y Miranda, en 12 Municipios y 18 parroquias, con un total de 819 registros. Las cifras agregadas para 3 meses de evaluación revelan que el 52% de los niños presentaban algún grado de desnutrición aguda (pérdida reciente de peso). De estos, el 9% presentaban las formas de desnutrición moderada y severa con alto riesgo de mortalidad. Es, específicamente este tipo de desnutrición aguda más grave, la que cuenta para los marcos internacionales de evaluación humanitaria según los cuales, se puede dar una alarma de crisis a partir del 10% de prevalencia de desnutrición. En parroquias de estados específicos como Vargas y Zulia estos criterios de alarma ya se rebasaron, en toda la zona estamos solo a 1% de ese umbral. El estudio revela que no solo es alta la proporción de niñas y niños con desnutrición aguda reciente, sino que se registra también una proporción alta (18%) de retardo de crecimiento, es decir, niños que no solo han perdido peso recientemente, sino que han acumulado ya la suficiente privación nutricional para que se haya retardado su crecimiento en forma permanente, lo cual, solo sucede en períodos de 2 a 5 años. Esto desmonta todo argumento de que la situación actual tenga sus causas en crisis recientes atribuibles a factores puntuales como las sequías del último año o la reducción del precio de petróleo, y deja ver que estamos ante una crisis de instalación lenta que ha ocurrido ante la mirada de todos sin que se haya respondido en forma adecuada. Los rangos de edad más afectados son los menores de 2 años y, entre estos, los menores de 6 meses. Tiene implicaciones irreversibles para el desarrollo afectivo, cognitivo y metabólico de la niñez y refleja, no solo la desnutrición del propio niño, sino la situación de mujeres que cursaron su embarazo con hambre. Los datos no son representativos del país, ni de los estados específicos, pero sí de las parroquias en las que Caritas despliega su programa de Supervivencia Infantil. Esta situación refleja gran precariedad, no solo del Sistema Alimentario nacional, sino de los sistemas de protección social que el Estado debió poner en marcha hace mucho tiempo. Ayer conocimos otra desgraciada acción de Maduro y su régimen. No aceptaron ayuda con medicinas del gobierno de Brasil pues el gobierno de Temer es “de facto”. Hasta Xi Jinping, Putin, Mercosur&OEA lo reconocen. Bolserías impías …