La policía federal estadounidense (FBI) interrogó a Michael Flynn, el exjefe del Consejo de Seguridad Nacional a quien el presidente Donald Trump le pidió la renuncia tras la revelación de conversaciones telefónicas que mantuvo con el embajador de Rusia en Washington, informó este martes el New York Times.
AFP
El interrogatorio, realizado por investigadores del FBI y cuyas características se desconocen, se desarrolló en los primeros días del nuevo gobierno republicano, iniciado el 20 de enero. El FBI no respondió a las preguntas de la AFP al respecto.
Los investigadores salieron de la entrevista con la sensación de que el general Flynn no había sido totalmente sincero, señala el diario.
El entonces consejero en seguridad nacional afirmó públicamente que sus contactos con el representante diplomático ruso en Washington, Sergey Kislyak, se habían centrado en puntos de escasa importancia y no habían abordado las sanciones impuestas a Moscú por el gobierno de Barack Obama.
Luego se supo que Flynn había conversado sobre ese tema con el embajador ruso a fines de diciembre.
En su carta de renuncia, difundida en la noche del lunes, el general retirado Flynn admitió haber entregado “informaciones incompletas” al vicepresidente electo Mike Pence, al cual “engañó involuntariamente”, según escribió.
Según el New York Times, poco después del interrogatorio al cual Flynn fue sometido por el FBI, la secretaria interina de Justicia Sally Yates advirtió el 26 de enero a la Casa Blanca que el general era vulnerable a un eventual chantaje de parte de los rusos, en función de las diferencias entre sus declaraciones públicas y la realidad.
El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo este martes que el presidente Trump fue informado al respecto de manera inmediata, por lo que sabía “hace semanas” que Michael Flynn había inducido a error a Pence y a otros funcionarios de la presidencia.
Si se probara que Flynn efectuó declaraciones falsas podría ser denunciado penalmente.
El caso de este consejero ha suscitado, por otra parte, interrogantes sobre las relaciones de la nueva administración de Donald Trump con Rusia.