El papa Francisco defendió que “ningún pueblo es criminal, narcotraficante o violento” y que “hay fundamentalistas y violentos en todos los pueblos y religiones”, en un mensaje a los participantes del encuentro de los Movimientos Populares que celebra en Modesto, en California (EEUU).
EFE
“Ningún pueblo es criminal y ninguna religión es terrorista. No existe el terrorismo cristiano, no existe el terrorismo judío y no existe el terrorismo islámico. No existe”, escribe el papa en su mensaje, que continua: “ningún pueblo es criminal o narcotraficante o violento”.
Para Francisco “hay personas fundamentalistas y violentas en todos los pueblos y religiones” y acusó de que estas “se fortalecen con las generalizaciones intolerantes, se alimentan del odio y la xenofobia”.
A los representantes de estos Movimientos Sociales, que el papa ha encontrado en varias ocasiones, les reiteró los conceptos de “los muros y del miedo; de los puentes y el amor”.
Y recordó que “ninguno de estos males comenzó ayer” porque “hace tiempo enfrentamos la crisis del paradigma imperante, un sistema que causa enormes sufrimientos a la familia, atacando al mismo tiempo la dignidad de las personas y nuestra Casa Común para sostener la tiranía invisible del dinero que sólo garantiza los privilegios de unos pocos”.
Pidió la colaboración de estos movimientos para implicarse para acabar con estos males y les indicó: “No debemos quedar paralizados por el miedo pero tampoco quedar aprisionados en el conflicto. Hay que reconocer el peligro pero también la oportunidad que cada crisis supone para avanzar hacia una síntesis superadora”.
“El desempleo es real, la violencia es real, la corrupción es real, la crisis de identidad es real, el vaciamiento de las democracias es real. La gangrena de un sistema no se puede maquillar eternamente porque tarde o temprano el hedor se siente”, agregó.
Por ello, instó a no caer “en el negacionismo” pues “el tiempo se agota”, aseveró.