Renault desveló este martes su nuevo monoplaza RS17 con el objetivo relativamente modesto de progresar en esta temporada de la Fórmula 1 antes de lanzarse a por metas más ambiciosas en un futuro a medio plazo.
AFP
“Esperamos acabar quintos en el campeonato de constructores”, explicó el presidente de Renault Sport Racing Jérôme Stoll durante una conferencia de prensa en Londres transmitida en directo en internet.
“Tengo mucha confianza porque nuestros equipos han hecho un trabajo extraordinario en estos últimos meses”, añadió.
La compra de Lotus permitió a la marca francesa volver a tener una escudería en el campeonato de 2016, aunque su regreso se saldó con un curso decepcionante, acabando en novena posición (de 11) en el campeonato de constructores, con solo ocho puntos.
La sorpresiva marcha anunciada el pasado 11 de enero del Team Principal de Renault Sport F1, Frédéric Vasseur, aumentó las dudas sobre las verdaderas capacidades de la escudería francesa.
“Los cimientos están puestos, ahora es el momento para Renault de obtener resultados en la pista”, dijo el director general de la escudería Cyril Abiteboul, cuyas relaciones con Vasseur eran notoriamente complicadas.
“El equipo ahora está en perfecta armonía, en perfecta comunicación y es un grupo de personas que trabajan juntas con un solo objetivo: estar a la altura en 2020”, declaró.
Para lograr sus objetivos en 2017, Renault contará con el experimentado piloto alemán Nico Hülkenberg (29 años), que sustituye al danés Kevin Magnussen, y con el británico Jolyon Palmer (26 años) que repetirá como piloto de la escudería.