Las orejas, a las que menos les prestamos atención, son las que más tienen qué decirnos. Y para muestra un botón:
Sirven de identificación:
A medida que crecemos, todo nuestro cuerpo aumenta de tamaño y la orejas no se quedan atrás. Sin embargo esta parte de nosotros nunca cambia de forma, transformándola en una especie de huella digital.
Fotografía las orejas de tus hermanos pequeños, hijos o sobrinos y compáralas con las que tienen años después. Verás que la diferencia es mínima.
Genética recesiva o dominante.
El tipo de gen que tú tienes puede verse en la forma de tus orejas. Cuando ésta termina de una forma pegada al cuello, correspondes a un gen de tipo recesivo, mientras que si terminas con una forma de gancho es que tú eres de gen dominante.
Pero ¡hey!…, no tiene nada que ver con la personalidad de cada uno, así que no pienses que por tener un gen dominante tengas un liderazgo innato o algo por el estilo.
Falta de vitamina y calcio.
Tu alimentación también puede ser revelada a través de tus orejas. Observa bien las tuyas y fíjate si tienen un color muy pálido. Si es así, debes poner atención a tus comidas, ya que esto podría significar que estás con un cuerpo bajo en vitaminas y calcio.
Problemas Renales.
A muchos se ponen las orejas coloradas y creemos el rumor de que eso significa que alguien está hablando sobre nosotros.
Pero en realidad hay algo mucho más importante que puede revelar este par de cartílagos, los cuales si están rojos durante un tiempo muy prolongado, nos está diciendo que podríamos padecer de problemas al riñón.
Afecciones cerebrales.
Por otra parte, si el rojo de esta parte del cuerpo es demasiado intenso, debemos preocuparnos algo más, ya que nuestra memoria puede estar en juego. Además revela constantes dolores de cabeza e incluso problemas cerebrales y si también están inflamadas entonces hablamos de algo que es crónico.
Es así como podemos comparar las orejas con pequeñas alarmas que nos avisan de diversas afecciones que podríamos estar padeciendo.
La reflexología en la oreja.
Acorde al punto anterior, presionando diversas de nuestra oreja podemos resolver problemas de salud tanto físicos como emocionales.
De hecho, se relaciona a la oreja con la forma de un bebé en posición fetal.
Como verás, los puntos de cada parte de nosotros están determinados en este lugar y la reflexología se encarga de hacer un adecuado tratamiento en cada uno de ellos, una técnica que ha ayudado a muchos, llegando a afirmar que puede ser incluso más útil que la medicina tradicional.
Incluso si algún día tienes algún dolor específico puedes aprender las partes de tu oreja que son la clave para aliviarte, tal como se ve en el dibujo.
Esto significa poder sanarte desde tu casa, trabajo o en cualquier lugar sin tener que ingerir ninguna medicina.