Cuatro de cada diez mujeres con cáncer de mama Her2 podrían evitar la quimioterapia y tratarse con terapias biológicas si se sometieran antes a un simple test genómico que analiza 50 genes y determina si el perfil genético de la paciente es más adecuado para un tratamiento u otro.
Esta es la conclusión del estudio ‘Pamela’, un ensayo clínico en el que han participado 19 hospitales españoles y que se publica hoy en “The Lancet Oncology”.
En el estudio -liderado por el grupo internacional de investigación clínica en cáncer de mama SOLTI- han participado 151 mujeres con cáncer de mama de 19 hospitales españoles.
El cáncer de mama se divide en tres grupos clínicos importantes: dos del tipo ER, que expresan receptores de hormonas, y un tercero que expresa receptores de HER2.
Los dos primeros afectan al 70 % de los pacientes y el tercero (HER2), a un 20 % de los enfermos de cáncer de mama.
El ensayo pretendía analizar si las pacientes con cáncer de mama HER2, con un perfil genómico determinado (llamado HER2-enriquecido), respondían bien al tratamiento biológico y podían evitar la quimioterapia.
El test llamado PAM50 analiza simultáneamente la expresión de medio centenar de genes del tumor, lo que permite “identificar hasta 4 subgrupos de cáncer de mama HER2: Luminal A, Luminal B, Basal-like y HER2-enriquecido”, explica Aleix Prat, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínic de Barcelona.
El estudio demostró que el fenotipo HER2-enriquecido, que representa un 60% de las pacientes, identifica a las mujeres con más posibilidades de éxito en un tratamiento sin quimioterapia.
Tras someterse al test, 151 pacientes con cáncer HER2 recién diagnosticado recibieron tratamiento biológico basado en dos fármacos, lapatinib y trastuzumab, y después se operaron.
Dieciocho semanas después, el tumor había desaparecido por completo en el 40% de las pacientes con un perfil genómico HER2-enriquecido, frente al 6% de las pacientes con otros perfiles.
Además, en el grupo de pacientes con un perfil HER2-enriquecido, el tumor se redujo significativamente de forma muy temprana.
“En este estudio era obligatorio realizar una biopsia a las dos semanas de tratamiento y ya vimos que en el 54% de las pacientes con un perfil HER2-enriquido no había tumor o sólo quedaban pocas células tumorales”, subraya el doctor Prat.
Tras demostrar de forma prospectiva la utilidad de un predictor genómico en cáncer de mama HER2, ahora, “el siguiente paso es demostrar que la supervivencia de las pacientes con tumores HER2 y un perfil genómico HER2-enriquecido es excelente, aunque no reciban quimioterapia”, concluye.
Prat, quien además es coordinador del comité científico de SOLTI e investigador principal del estudio, destaca que, dado que las pacientes HER2 son cerca del 20% de los enfermos de cáncer de mama, y que “el 40% de ellas con este perfil genómico determinado responde espectacularmente bien al tratamiento dirigido contra la proteína HER2, aproximadamente 2.000 mujeres diagnosticadas cada año en España podrían ser tratadas sin la necesidad de recibir quimioterapia”.
A su juicio, estos resultados suponen un avance muy importante dado que “éramos conscientes de que la enfermedad HER2 era biológicamente heterogénea, pero hasta ahora no sabíamos cómo utilizar esta información biológica para tratar de forma distinta a las pacientes con esta enfermedad”. EFE